Calle Nicaragua, cuarto piso. El antiguo salón de actos de la sede del PSC se ha convertido en el epicentro de su campaña para el 26-J. En la agenda del día ya no hay visitas a mercados ni grandes mítines en polideportivos. Se han sustituido por lo que desde el partido han llamado “diálogos”, en un espacio que recuerda más a un plató de televisión que a un auditorio.

Allí dentro, la candidata recibe diferentes invitados que se sientan en los sillones o taburetes, dependiendo del día, y hablan de su sector, desde energías renovables hasta educación. En el tramo final, Batet hace una lista de las propuestas del partido, leyendo de unas targetitas al más puro estilo magazine, ante una cincuentena de sillas para el público.

Este formato de campaña entre las cuatro paredes rojas ha perdido el poco sentido que le quedaba cuando, al acto de esta mañana, incluso los asistentes eran los propios trabajadores de la sede del PSC. Batet ha aparecido acompañada de Carles Martí, que había sido excluido de la campaña desde que renunció en las primarias y fue relegado a liderar la lista en el Senado. Martí ha hecho de telonero con un breve discurso, al cual la número uno le ha puesto la guinda. Todo esto en menos de 20 minutos de encuentro.

Batet y Martí, en el acto de esta mañana en la sede / Maria Macià

Los actos fuera de Nicaragua han sido salidas a núcleos socialistas históricos donde, en algunos casos, la asistencia dejaba mucho a desear. Las pocas apuestas seguras que todavía le quedan al partido son municipios como Santa Coloma de Gramenet o l'Hospitalet de Llobregat, donde se ha aprovechado para llevar a grandes líderes como Pedro Sánchez o Zapatero y asegurar el tiro.

El partido ha centrado la campaña en el “formado diálogo” en la sede por diferentes motivos. En primer lugar, se ahorra grandes cantidades de dinero que se tendrían que destinar al alquiler de espacios o equipos, un gasto que al PSC no le conviene asumir teniendo una deuda de 12M€. También se tiene que tener en cuenta que el partido quería hacer una campaña muy enfocada a los medios de comunicación, donde tienen un bloque informativo asegurado hagan lo que hagan. Además, el poder de convocatoria de los socialistas en Catalunya ya no es lo mismo que unos años atrás, cosa que explica la preferencia por los espacios reducidos.