El presidente del TSJC, Jesús María Barrientos, ha salido hoy del Palau de Justícia para explicar la memoria judicial del 2017 en el Parlament de Catalunya. Durante más de una hora ha llenado la comisión de justicia de datos y después de las preguntas de los diferentes representantes de los grupos, ha advertido que no le corresponde entrar a analizar ni resoluciones, ni sentencias, ni mucho menos la independencia judicial.

Con todo, ha respondido algunas preguntas de Junts per Catalunya y ERC, y también de Ciudadanos, que ha planteado al presidente de los jueces catalanes si "es difícil trabajar con concentraciones delante de los edificios judiciales encabezadas algunas de ellas por representantes del Govern", con la coletilla de si "es difícil soportar el acoso en los domicilios" de algunos de los jueces, refiriéndose claramente a las pintadas en la fachada de la casa de Pablo Llarena.

Jesús María Barrientos ha negado que haya amenazas concretas a jueces, al menos a él no le han llegado, ha dicho. Pero sí que ha remarcado que hay una situación y unos ciertos comportamientos "que pueden dificultar a los jueces desarrollar su acción con la serenidad que necesitan para la toma de decisiones". Según Barrientos, "no son situaciones normales" pero tampoco hay "amenazas concretas".

"Las porras hicieron mucho daño. Pero las togas están haciendo mucho más"

Barrientos no ha querido entrar en política. Y lo ha dicho así de claro cuando en la segunda ronda de intervención de los grupos Eusebi Campdepadrós le ha dicho: "Las porras hicieron mucho daño. Pero las togas están haciendo mucho más".

El presidente de los jueces catalanes se ha cerrado en banda. "Ni soy la persona, ni es el espacio", ha dicho dejando claro que ante las intervenciones "de alto contenido político" no podía responder. Y ha recordado que su comparecencia en el Parlament "no es una comparecencia obligada".

Tampoco ha querido entrar en el hecho de que los jueces quieran o no venir a trabajar a Catalunya. "El juez necesita un reconocimiento, y el retributivo es uno. No me viene a la cabeza ningún otro motivo", ha dicho argumentando que no hay motivos políticos para que los jueces se nieguen a venir a Catalunya o quieran marcharse.

El catalán en los juzgados

Nuevo reproche de Junts per Catalunya por el poco uso del catalán en los juzgados y nuevo pretexto de Barrientos: "Poco más podemos hacer".

El catalán es idioma oficial, pero que se utilice en las sentencias es decisión del juez. De hecho, hoy Barrientos ha empezado su exposición en catalán, pero para "agilizar" la exposición ha dicho que seguiría la comparecencia en castellano.