¿Qué pasó entre el viernes 27 de octubre del 2017, después de proclamar la República, hasta el 2 de noviembre?

Seguramente, pasarán años hasta poder explicar claramente qué pasó aquella semana. Qué hizo el Govern. Cómo se tomaron las decisiones. Las colectivas y las individuales.

Se tendrán que haber acabado los procesos judiciales, de futuro incierto, y quién sabe si estaremos atascados en las puertas de la República, o bien empezando a caminar desde un Estado independiente.

Cuando los momentos críticos tengan ya un perfil más próximo a los buenos recuerdos e, incluso, en algunos casos, de anécdota, la historia se engordará con el relato de lo que pasó aquella semana en que se proclama la República, parte del Govern se marcha al exilio y la otra parte acaba en la prisión.

Uno de los episodios lo protagoniza el conseller de Interior, Joaquim Forn, y lo vive en primera persona su mujer, Laura Masvidal.

Forn aparece en la rueda de prensa que hace Carles Puigdemont en Bruselas. Pero dos días más tarde, vuelve a Barcelona y después va a la Audiencia Nacional, donde declara y le aplican la medida cautelar de prisión preventiva.

¿Por qué volvió?

"Me gustará que algún día nos lo explique bien explicado y nos ha prometido que algún día nos lo explicará", dice su mujer, Laura Masvidal.

Forn comunica a la familia el fin de semana posterior a la proclamación de la República que se va a una reunión y deja el móvil en casa. "No os puedo decir más. Y se marchó", relata Laura.

"Veníamos de días de mucha tensión y en casa había una especie de pacto donde él sabía que no tenía que sufrir", dice su mujer. A nosotros no nos supuso ningún trauma ni sorpresa el hecho de decir que tuviera una reunión, que se tenía que ir y que ya se pondría en contacto. Yo no sabía dónde estaba", dice Laura.

"Yo no sabía dónde estaba hasta que un día anunciaron una rueda de prensa y yo esperaba la rueda de prensa del president en Bruselas y vi que estaba allí y pensé: 'ostras está en Bruselas'. Vale, y aquí me quedé", dice con la mirada perdida en el aparato de televisor de la sala.

Gobierno Bruselas Puigdemont - EFE

Y recuerda que el día de la castañada, el 31 de octubre, recibió una llamada de un móvil que no conocía desde el extranjero. Era él. "Me dijo: '¿Laura me puedes venir a buscar al aeropuerto? Llego esta noche'".

Justo en aquel momento se hace pública la citación para ir a declarar a la Audiencia Nacional el 2 de noviembre. Ni Forn ni su familia la había recibido. De hecho, la reciben el día 1 a las 12 horas del mediodía. Menos de 24 horas antes de la comparecencia, cuando Joaquim Forn ya está en Barcelona.

"Cuando Joaquim decidió que volvía, no sabía que estaba citado, simplemente volvía a casa", explica Laura.

Aquella noche Laura y su hija pequeña fueron al aeropuerto a recogerlo y se encontraron un grupo numeroso de personas esperándolos, entre los cuales, uno de ultras que recibieron los a consellers Forn y Dolors Bassa —que volvía con el mismo vuelo— a empujones. La hija de Forn tuvo un ataque de nervios a raíz de los empujones de los ultras y de los periodistas "sin ningún tipo de escrúpulo". "Es una cosa más en la lista para olvidar", concluye.

Horno aeropuerto del Prat españolistas EFE

La última noche

"Volvía a casa. Se había marchado para una reunión y volvía. No creo que tuviera tiempo de pensar que iría a la prisión", explica Laura, aunque sí que admite que la noche antes de comparecer a la Audiencia Nacional fue extraña.

"En Madrid la sensación fue muy extraña. Al meternos en la cama había una cosa extraña y por la mañana también. Yo creo que tenía ciertas dudas", sobre si entraría en la prisión.

Horas más tarde, Carmen Lamela dictaba la prisión provisional sin fianza y los consellers y conselleres salían de la Audiencia Nacional con furgones policiales dirección a las prisiones de Estremera y de Alcalá Meco.

Pero Laura Masvidal explica que todos los miembros del Govern fueron a la Audiencia Nacional seguros y convencidos de que iban a dar todas las explicaciones que hiciera falta. "Aquella imagen, que él dice que odia, pero que yo encuentro muy bonita, entrando todos juntos en la Audiencia... Es un gobierno. Es la imagen de un gobierno que va a dar explicaciones", relata.

"Él odia aquella imagen, pero yo veo a personas con la dignidad intacta", concluye.