Después que ayer el Tribunal Supremo abriera una causa penal contra la exalcaldesa de València, Rita Barberá, por el presunto blanqueo de capitales en el ya conocido caso Taula, y de que diferentes formaciones pidieran la dimisión de la senadora, hoy miembros del Partido Popular han salido en tromba a presionar a la senadora e instarla a que deje su escaño en el Senado.

Entre estas voces ha aparecido la del candidato a lehendakari por el PP, Alfonso Alonso, que, en una entrevista en Onda Vasca, ha soltado que Barberá "tiene que pensar en el partido en que ha militado tanto tiempo y tiene que tomar una decisión adecuada hoy" porque, si no, "lo tendrá que hacer la dirección del partido", lo ha avisado.

Preocupado por todo lo que se juegan los populares en las urnas el próximo 25-S -tanto en el País Vasco como en Galicia-, Alonso se ha lamentado de que su formación "no se merece ir con este perjuicio en los hombros" y, es precisamente por eso, que espera "una reacción clara" por su parte.

Imposible de aguantar...

Aunque ha apelado a la "cautela", porque considera que puede haber cuestiones que afecten a personas "que pueden ser inocentes", Alonso ha subrayado que "todo el mundo tiene derecho a defender su inocencia", sin embargo, eso sí, cansado y preocupado por su candidatura a lehendakari, ha puesto de relieve que "llega un momento en que ya no se aguanta más y creo que hemos llegado a este momento y lo hemos sobrepasado".

Según su opinión, "sobrepasar" el momento quiere decir que "ya ha causado mucho perjuicio" y, además, "escandaliza a la gente". Y no sólo eso. También se ha lamentado de que eso ha causado un "gran disgusto" al PP vasco porque, después de trabajar "muchos años" en Euskadi, ahora se ve "perjudicado". "Estas noticias vienen de fuera, pero a nosotros nos golpean como un mazo".

...y pensar en España

A todas estas voces también se ha sumado la del candidato a la presidencia de la Xunta de Galicia, Alberto Nuñez Feijóo, que ha soltado al acabar un acto de campaña que "espero que Barberá piense en España y el PP antes que en ella misma".

Feijóo lo ha emplazado a tomar una decisión después de pasar "mucho tiempo" en política y con una trayectoria que la llevó a ganar "muchas elecciones" y a tener "mucho apoyo electoral a su ciudad".

Ahora bien. A pesar de haber dicho todo eso, el candidato del PP gallego ha asegurado que no duda de su inocencia, sin embargo, eso sí, ha asegurado que esta decisión servirá para "facilitar la gobernabilidad de España y los intereses de la política limpia y transparente".

Muy herida (y triste)

El ministro de Exteriores en funciones, José Manuel García-Margallo, ha querido poner de manifiesto en RNE que la aún senadora "está muy herida", pero se ha mostrado convencido de que no hará nada que perjudique al partido, del cual es una de las fundadoras, ni tampoco a Mariano Rajoy por "la entrañable amistad que los une".

Margallo ha hecho pública su esperanza de que Barberá anuncie esta mañana cuál es la decisión que tomará y ha justificado que ayer bajara del AVE en Cuenca cuando conoció la decisión del Supremo porque "está sometida a una presión realmente importante" y creyó conveniente no asistir al Senado para "no desviar la atención".

Sumar, no restar

El presidente del PP extremeño, José Antonio Monago, se ha añadido a las declaraciones de sus compañeros y ha puesto sobre la mesa que "lo que no suma en política, resta, y ahora lo que se necesita para formar gobierno son elementos que sumen y que no resten". Y, por lo tanto, esta situación "se tiene que resolver".

Si no lo resolviera ella misma, el expresidente balear y también senador, José Ramón Bauzá, se ha mostrado confiado que el PP "hará lo que toca y lo correcto", todo y que a su parecer "hoy por hoy, la única persona que puede asumir la responsabilidad y tomar una decisión es ella".

Alberto Fabra, también senador popular, ha apostado por ella y se ha mostrado confiado en que "tomará la decisión correcta como hecho siempre".

A toda leche

La diputada popular Celia Villalobos ha salido en defensa de Barberá asegurando que "es una persona profundamente honesta", sin embargo, eso sí, le ha recomendado que renuncie "a toda leche" a su escaño al Congreso, pero no por la polémica generada y por la posible imputación, sino porque uno de los magistrados de la Sala de lo Penal del Tribunal Supremo es Cándido Conde-Pumpido, que fue fiscal del Estado durante la época Zapatero, y considera que "nunca ha sido imparcial".

Otros, sin embargo, como la secretaria general del partido, María Dolores de Cospedal, han evitado pronunciarse sobre el futuro de la exalcaldesa valenciana.