El vicesecretario general de Ciudadanos, Edmundo Bal, ha anunciado las primeras incorporaciones a su lista para disputar la dirección del partido naranja. Ha fichado al concejal del Ayuntamiento de Madrid, Santiago Saura, número dos de la vicealcaldesa madrileña, Begoña Villacís, en las elecciones de 2019. También ha incorporado a dos diputadas en el Congreso de los Diputados, Sara Jiménez y María Carmen Martínez. El anuncio de estos tres nombres, que conformarán el "núcleo duro" de la candidatura de Bal, consuma el desafío a la actual presidenta del partido, Inés Arrimadas, que previsiblemente presentará otra lista a las primarias del 9 y 10 de enero.
Bal ha dado a conocer los nombres en declaraciones delante del Congreso, y también ha explicado que este martes hizo un "último intento" por llegar a un acuerdo con Arrimadas, y le ofreció que mantuviera la portavocía en la Cámara Baja, en vez de dársela a la diputada a María Muñoz, como inicialmente le había ofrecido. Bal ha lamentado públicamente que "no fuera suficiente" con esta oferta, y aunque su anuncio constata la ruptura definitiva en el seno de Ciudadanos, no ha querido cerrar la puerta a Arrimadas, para quien asegura que todavía hay sitio porque "es una magnífica parlamentaria".
Edmundo Bal define su "núcleo duro"
De las cuatro personas que encabezarán la lista, Santiago Saura será el candidato a secretario general del partido, Sara Jiménez a la vicesecretaría; y Mari Carmen Martínez, a coordinadora nacional. Se prevé que el resto de nombres se hagan públicos el viernes, antes de la presentación oficial de las listas, que se hará entre el 26 y 29 de diciembre. Sin embargo, otros miembros del partido que han mostrado su apoyo a Bal incluyen al diputado Miguel Gutiérrez, el senador Miguel Sánchez y Juan Carlos Bermejo, que compitió con Albert Rivera como líder del partido en las primarias de 2017 y con Ignacio Aguado en el 2019 para ser candidato a las autonómicas de Madrid.
El proyecto de Bal aspira a hacer una "renovación" completa del partido después batacazo que supusieron las elecciones andaluzas. La idea, pues, es recuperar el ideario inicial de Ciudadanos como un partido "de centro, liberal y progresista" y poder ganar electorado tanto a la derecha como a la izquierda, buscando al mismo tiempo alejarse de las posiciones de los populares. El vicesecretario general lo ha definido como "una candidatura de cambio" que busca "revitalizar el espacio liberal" de cara a las elecciones municipales y autonómicas de 2023.
Bal ha explicado que el proyecto intenta "aprovechar el talento" del partido "sin teatro ni cosmética" y en este sentido ha adelantado que una gran parte de los integrantes serán personas desconocidas para el público general. "La intención es hacer de Ciudadanos un vehículo renovado en el centro español como partido liberal y progresista. No ser subalternos de ninguna otra opción política", ha afirmado Bal.