Las amenazas del fiscal general del Estado, José Manuel Maza, contra los voluntarios del referéndum del 1 de octubre han tenido un efecto totalmente opuesto a la disuasión. Lejos de retroceder, decenas de catalanes han decidido apuntarse como voluntarios y lo han hecho notar en la red.

Sólo unas horas después del anuncio del fiscal, Twitter se ha llenado de mensajes de usuarios plantando cara a la amenaza de Maza. En varios tuits, aseguraban que las intenciones de la fiscalía eran "un motivo más" para hacer de voluntarios. Otros, daban por hecho que el Govern conseguirá sobrepasar los 4.500 voluntarios necesarios para hacer posible una jornada de votación como la que prepara Catalunya.

Las demandas para poder apuntarse ya en una lista de voluntarios van en aumento. De momento, el president, Carles Puigdemont, sólo adelantó este miércoles que el Govern tiene la intención de abrir una bolsa para que "trabajadores que lo quieran, funcionarios o no, se puedan apuntar para que el Govern los acredite como agentes electorales".