Declaración de intenciones en los primeros movimientos de agenda de Pere Aragonès. El president no asistirá finalmente a la cena inaugural que el Círculo de Economía celebra este miércoles por la noche en Barcelona y que contará con la participación del rey Felipe VI. En paralelo, el viernes viajará a Waterloo, en Bélgica, para entrevistarse con el president Carles Puigdemont. "Desde el Govern se quiere trasladar que lo que haga el Rey del reino de España no condicionará la agenda del president en territorio catalán", ha afirmado la portavoz.

Ambas cosas las ha confirmado la portavoz del Govern de la Generalitat, Patrícia Plaja. Aunque se había especulado con la presencia de Aragonès en la cena con el monarca, finalmente quien irá es el vicepresident Jordi Puigneró. Antes, a primera hora de la tarde, y como es tradición, el president inaugurará las jornadas de la reunión anual del Círculo de Economía con una conferencia al lado del presidente de la entidad, Javier Faus. Por el cónclave desfilarán primeras espadas del panorama político español y catalán. Desde presidentes autonómicos como Francina Armengol o Alberto Núñez Feijoo, a la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau. La clausura estará a cargo de Pedro Sánchez.

Sánchez en Barcelona, Aragonès en Waterloo

Cuando el presidente español esté en Barcelona pronunciando su conferencia en el Círculo de Economía, Aragonès estará camino de Waterloo, en Bélgica, donde viajará para reunirse con Carles Puigdemont. La intención de la visita es abordar los próximos pasos que tendrá que dar el Govern de la Generalitat y tratar de compasar la estrategia independentista. A lo largo de esta semana, el presidente se está reuniendo con los líderes de los grupos parlamentarios.

El pistoletazo de salida de esta ronda de contactos fue este lunes con los dirigentes de Junts, Albert Batet y Mònica Sales. En el encuentro, los junteros le trasladaron la necesidad de no cerrar ninguna puerta para alcanzar la República Catalana. Los de Puigdemont se comprometieron a participar con honestidad y lealtad en la mesa de negociación, que ven con escepticismo. Ahora bien, reclaman a Aragonès, a Esquerra Republicana, que si este espacio de diálogo no da resultados tangibles, se exploren todas las vías posibles. Y que estas se discutan en la nueva dirección colegiada, que todavía tiene que tomar forma y que está pendiente de la reestructuración del Consell per la República. Aragonès se comprometió a que fuera así.

En la imagen principal, Aragonès, Puigneró y Vilagrà camino del Consell Executiu. / R. Moreno