Un juez de Barcelona ha anulado la sanción que la División de Asuntos Internos (DAI) impuso al mosso d'esquadra que gritó "la república no existe, idiota" a un miembro del cuerpo de Agents Rurals en las protestas independentistas contra la reunión del Consejo de Ministros en Barcelona en 2018.

En la sentencia, según informa Efe, el titular del juzgado de lo contencioso administrativo número 6 de Barcelona estima el recurso del agente antidisturbios de los Mossos d'Esquadra y anula la sanción por una falta leve —que implica una suspensión de empleo y sueldo de hasta quince días— que le impuso la dirección general de la Policía, de la conselleria de Interior, a instancias de la DAI.

"Sin intención ofensiva"

En su sentencia, que se puede recurrir, el juez concluye que el mosso profirió esta frase en un contexto de "gran tensión" y cuando estaba discutiendo con un miembro de los Agents Rurals de la Generalitat que le recriminaba el dispositivo policial, y subraya además que el término "idiota" se utiliza habitualmente de forma coloquial "sin ninguna intención ofensiva", por lo cual no aprecia voluntad de "despreciar, insultar u ofender".

¿Qué pasó?

Los hechos ocurrieron la tarde del 21 de diciembre de 2018 cuando el mosso, representado por el abogado José María Fuster-Fabra, de los servicios jurídicos del Sindicato de Policías de Catalunya (SPC), estaba intentando dispersar con varios compañeros a grupos de independentistas que protestaban en la zona de Pla de Palau contra la reunión en Barcelona del Consejo de Ministros. El mosso intentó que el Agente Rural que se manifestaba al lado de un grupo de independentistas colaborara con él, a causa de su condición de funcionario, para que otros concentrados respetaran el cordón de seguridad que intentaban establecer los Mossos d'Esquadra.

En un vídeo que se hizo viral se observó y oyó como el agente rural alegó que "estaban construyendo la República", y el mosso le respondió: "Pues defiéndeme a mí y no a estos hijos de puta". El agente rural replicó: "Yo defiendo la república", y el mosso resolvió: "Qué república ni qué cojones... La república no existe, idiota".

Según el juez, la expresión "hijos de puta" dicha por el agente es una expresión "genérica", no dirigida a nadie en concreto, por lo cual, igual que la frase "la república no existe" no puede ser "merecedora de reproche" porque no pretendió injuriar a nadie.

Aunque el juez reconoce que los funcionarios tienen la obligación de dirigirse a los ciudadanos de forma respetuosa, en este sentido precisa que el término "idiota" lo profirió a un funcionario que no puede tener la "consideración de ciudadano común", ya que llevaba el uniforme de un agente rural.

Además, sostiene que cuando el antidisturbios dijo la palabra "idiota" se encontraba en un momento de "tensión", por las protestas y porque además los hechos ocurrieron a las 17.00 horas y llevaba en servicio desde las 05.00 horas.

La tensión, un argumento clave

Por este motivo, el juez considera que "es más que razonable que el agotamiento y la tensión acumulada en la jornada laboral pudieran llevar a esta situación, que tiene que considerarse fruto de una excitación o contrariedad pasajera y puntual consecuencia de la tensión vivida en estos momentos".

"La expresión fue proferida por la agente después de una tirante conversación en una situación en la cual se le estaba recriminando su actuación policial y siente que tenía conocimiento de los graves disturbios que se estaban produciendo en aquella zona en ese momento. No se produjo de forma aislada o sin un contexto previo", subraya la sentencia.

Imagen principal: Mossos d'Esquadra / ACN