Visto por sentencia el juicio contra el exdiputado de la CUP, Antonio Baños, para negarse a responder a VOX durante el juicio al procés, en febrero de 2019. El juicio no ha durado ni una hora, entre otros, porque Baños ha renunciado a declarar porque no lo podía hacer en catalán, tal como ha pedido su abogado en el inicio de la vista. Baños ha dicho que no accedía "para hablar en una lengua extranjera y ser juzgado fuera de jurisdicción". El tribunal ha rechazado la petición de la defensa alegando que la lengua oficial en la Comunidad de Madrid – donde se juzgan los hechos – es el castellano. "No es un capricho, lo dice la ley orgánica del Poder Judicial", ha remachado la jueza Hortensia de Oro – Pulido Sanz, que ha añadido que "si quiere expresarse aquí tiene que hacerlo en castellano; no tiene este derecho [de hacerlo en catalán]". La jueza se ha añadido a la oposición de la fiscalía, que ha recordado que Baños entiende y habla perfectamente el castellano. El abogado del periodista, Carles López, ha recordado al tribunal que hicieron la petición para declarar en catalán antes del juicio - el lunes - y ha lamentado que no hayan dado una respuesta hasta este jueves "sobre la marcha y de forma improvisada". También ha denunciado "una vulneración de derechos fundamentales". Como la jueza ha suspendido el interrogatorio, López se plantea presentar una cuestión de nulidad en caso de que haya sentencia condenatoria.

 

Petición a la baja

La fiscalía madrileña se ha alineado con la del Tribunal Supremo y, antes de empezar la vista, ha rebajado la petición de condena contra Baños, de 6 a 4 meses de prisión e inhabilitación por el derecho a sufragio pasivo, la misma pena que el alto tribunal solicita para Eulàlia Reguant. "Hubo una constante, reiterada y manifiesta negativa a responder a las preguntas de todas las partes", ha argumentado el ministerio público, que ha recordado que el trabajo de la presidencia del tribunal es el de hacer la criba de las preguntas y seleccionar cuáles pueden dañar la moral del acusado, y "hacer de intermediario entre el testigo y las partes".

Absolución paraBaños

A su vez, el abogado del acusado ha insistido en que su cliente "no se negó a declarar", "no se opuso a responder las preguntas, sino que había una oposición a quien le preguntaba". De esta manera ha recalcado que Baños aceptó inicialmente la fórmula que propuso Marchena, en febrero del 2019, una vez el exdiputado se negó a responder a VOX. Tal y como se ha proyectado al principio del juicio, Baños respondió a las preguntas de VOX formuladas por Manuel Marchena - en dos ocasiones -, pero una vez él pidió que se aclarara a quien estaba respondiendo, el juez del Supremo suspendió la declaración de golpe. Según ha explicado el letrado, "no es una manera habitual de llevar a cabo el interrogatorio; ocasionaba dudas al respecto". Por todo ello, López ha reclamado la absolución de Baños insistiendo en que no se puede considerar desobediencia grave. La única intervención del exdiputado ha estado antes de entrar en los juzgados de Madrid, donde ha recordado que "el fascismo nunca es una opinión, es un delito". "Cualquier persona de bien tendría que aislar siempre la ultraderecha en cualquier lugar; ya no es una broma ni son marginales", ha subrayado.

 

La vista oral se ha hecho al Juzgado de lo penal número 30 de Madrid porque Baños ya no es diputado y, por lo tanto, ha perdido la condición de aforado, y es la jurisdicción en la cual se cometió el presunto delito. A su excompañera a la CUP, Eulàlia Reguant, la han juzgado este miércoles en el Tribunal Supremo, acusada también de desobediencia grave. Ante el juez, la diputada en el Parlamento ha denunciado la represión del Estado español. "No quería contestar a la extrema derecha, a quien representa el fascismo, el racismo y el machismo", se ha reafirmado. El fiscal del caso, Carmelo Quintana, pide que se la condene a cuatro meses de prisión y de inhabilitación después de afirmar que la posición de la cupaire es "contradictoria" porque "había afirmado que asumiría las consecuencias" de no responder a VOX durante el juicio del procés.