"Desoír" la suspensión del Tribunal Constitucional sobre la Conselleria d'Afers Exteriors. Éste es el reclamo que la diputada de la CUP Anna Gabriel ha exigido al Govern después del anuncio del TC de haber admitido a trámite la anulación de la conselleria de Raül Romeva.

"Nada de nuevo bajo el sol. Era de esperar", se ha lamentado Gabriel, que ha aprovechado para cargar contra el Estado en una entrevista en Europa Press asegurando que "el ordenamiento jurídico español se fundamenta en estas anomalías".

Por eso, ha pedido al Govern que se cumpla con el texto de la resolución independentista del Parlament del 9 de noviembre, en el que consideraban "ilegítimo" el Tribunal Constitucional.

Esta ilegitimidad, según la diputada cupaire, se fundamenta en "un litigio competencial que se mueve en un marco autonómico, mientras nosotros andamos en otra dirección." Así pues, ha explicado que a la hora de dibujar las políticas públicas, los soberanistas no se regirán por la legalidad española, sino por la hoja de ruta independentista.

"Entendemos que desoír lo que dice el TC es hacer aquello que el conseller prometió" porque no hacerlo "significaria reconocer que esta institución tiene alguna ascendencia sobre la mayoría parlamentaria", ha sentenciado, y ha insistido en ignorar la suspensión asegurando que "estaremos al lado de la conselleria y del conseller para ir adelante".