La Assemblea Nacional Catalana (ANC) advierte en un documento que las diferencias entre PDeCAT y ERC dentro de Junts pel Sí pueden poner en riesgo el proceso soberanista, a la hora que percibe "una cierta falta de entusiasmo" en el movimiento independentista. La entidad ha hecho público el informe de gestión elaborado por la secretaría, que se elevará a la asamblea general ordinaria que tendrá lugar el sábado que viene a Granollers (Vallès Oriental)
En el apartado de la comisión de movilizaciones, el texto analiza todas las actividades realizadas y destaca la "consolidación" del movimiento soberanista después de cuatro años de "movilizaciones masivas" que han ido "aumentando", pero "también se empieza a percibir una cierta falta de entusiasmo".
En el apartado de la comisión de incidencia política, el documento resalta que la ANC asumió como una "victoria propia la creación de Junts pel Sí" para las elecciones del 27 de septiembre del 2015 y, por lo tanto, dejó el liderazgo en manos de los partidos que conforman la coalición.
"Los mismos partidos que desde el día siguiente de las elecciones mostraron de forma evidente que sus diferencias de modelo pueden llegar a poner en riesgo el proceso político que estamos llevando todos a cabo", añade la ANC.
Pérdida de liderazgo de la ANC
La entidad también hace autocrítica sobre el "error cometido de haber situado en igualdad de condiciones la CUP y Junts pel Sí", cosa que "disminuyó considerablemente el liderazgo que ha tenido la Assemblea durante los últimos años". Por esta pérdida de liderazgo, la Assemblea "no tuvo voz a la hora de intentar recuperar la mesa de fuerzas políticas y entidades soberanistas".
"Seguramente, una parte de la imposibilidad de recuperarla también vino por el cuidado a (o el complejo de) no explicitar la incomparecencia de una de las partes independentistas", añade el documento en alusión a la CUP.
No obstante, la organización independentista considera que la apuesta por el referéndum ha servido para que recupere su lugar, el de hacer de "altavoz de la sociedad civil" con el objetivo de celebrar la consulta y, ya en este contexto, apuesta para "liberarse de complejos": "Quien no quiera estar explícitamente a la Assemblea, no es necesario que esté", añade.
La asamblea general ordinaria del sábado que viene también aprobará la hoja de ruta, que establece que, en caso de que el Gobierno español impida el referéndum, la Assemblea organizará las movilizaciones necesarias para exigir que "se proclame la independencia".