El conseller de Acción Exterior, Relaciones Institucionales y Transparencia, Alfred Bosch, cree que los partidos independentistas tienen que "evitar la involución del Estado" y apostar por un Gobierno que "no empeore todavía más las cosas". En una entrevista a la ACN, Bosch asegura que "peor es peor, peor no es mejor", y rechaza las tesis de los que equiparan PP y PSOE o aseguran que un ejecutivo español que aplique mano dura a Catalunya contribuiría a hacer aumentar más el independentismo. Según Bosch, hace falta "evitar una alianza de partidos que quieren volver al 155 sin justificación" y al mismo tiempo exigir "diálogo sin condiciones" a Pedro Sánchez. "Es la mejor solución, nos tenemos que mover entre estos dos límites", afirma.

Para Bosch está "bastante claro" que las líneas políticas del PP y el PSOE son "diferentes" y aunque destaca que "ninguno" es el suyo, admite que prefiere un gobierno socialista.

"Lo que tenemos que conseguir es que el talante más dialogante que exhiben por todo el mundo se cumpla de manera tangible", destaca al conseller de Acción Exterior.

Bosch recuerda que los partidos independentistas ya votaron la moción de censura contra Mariano Rajoy con el espíritu "de abrir una ventana de esperanza al diálogo" y "acabar con las equivocaciones" de los que sólo "apuestan por la represión". "Tenemos la obligación de empujar para que eso pase", afirma, añadiendo que ahora el diálogo "se tiene que confirmar y materializar".

Con respecto a la situación al ejecutivo catalán, Bosch niega discrepancias entre los socios de gobierno de ERC y JXCat. "Es un gobierno que está gestionando, que cuadra los números, que está haciendo trabajo", dice.

El conseller de Acción Exterior dice estar "muy satisfecho" con la tarea del ejecutivo, que cree que hace "mucho trabajo", especialmente en un momento delicado a nivel político. "En el contexto en que estamos, es admirable la solidez y el trabajo", asegura.

Bosch admite "debates" como en todos los gobiernos de coalición, pero niega que se trate de una alianza débil. Preguntado por los consellers que han abandonado al ejecutivo, como Ernest Maragall, Elsa Artadi o
Laura Borràs, el responsable de Exteriores dice que lo han hecho para ir a "otras funciones que han considerado a más prometedoras o que les interesaban más", pero niega que eso signifique que el Govern "pierde gas".

"Tenemos un gobierno que está haciendo buen trabajo, no veo la crisis. ¿Crisis, qué crisis? Ni en el gobierno de Catalunya ni en la actividad legislativa", argumenta.