La alcaldesa de Vic, Anna Erra, está citada a declarar el próximo 25 de febrero por los mensajes independentistas que, durante tres semanas, se difundieron por la megafonía del Ayuntamiento, el verano pasado.

El Juzgado de Instrucción número 3 de Vic ha admitido a trámite una querella presentada por un abogado asturiano. La alcaldesa tendrá que responder no sólo por un delito de prevaricación y malversación sino también de odio.

Erra, que todavía no ha recibido ninguna notificación y se ha enterado por los medios de comunicación, ha asegurado que se siente tranquila, que no ha hecho nada mal hecho y que no se gastó dinero público.

El mensaje decía con un sonido de campanas imitando el toque de somatén que no se tenía que normalizar "una situación de excepcionalidad y urgencia nacional".