Continúa el goteo de reacciones a la decisión de la Asamblea de condicionar su participación en el espacio de diálogo entre partidos y entidades catalanas para preparar la negociación con el Estado a que no estén los comunes. Este lunes ha sido la alcaldesa Ada Colau quien ha replicado a la presidenta de la ANC, Elisenda Paluzié. Lo ha hecho de forma tan escueta concisa como contundente: "el diálogo es contradictorio con el sectarismo".

En la línea de lo que ya expresó ayer Jèssica Albiach, la líder de Catalunya en Común ha criticado la actitud excluyente de la Assemblea, en declaraciones públicas durante un acto como alcaldesa. En la misma comparecencia, Colau se ha mostrado esperanzada con el nuevo Gobierno de España y le ha pedido "compromiso para trabajar rápido y aplicar políticas sociales "urgentes" y "medidas valientes" para paliar la emergencia climática.