El acto de Ciudadanos convocado en el pueblo navarro de Altsasu ha provocado tensión entre los concentrados españolistas y antifascistas. Una hora antes que empezara el acto de España Ciudadana, plataforma creada por la formación de Albert Rivera, centenares de manifestantes antifascistas se han concentrado en el pueblo navarro bajo el lema "Dejad Altsasu en paz", un día después de que miles de personas se concentraran en el mismo municipio como muestra de rechazo al acto españolista.

Altsasu es el pueblo donde una pelea de bar entre dos guardias civiles y unos vecinos ha acabado con ocho jóvenes cumpliendo penas de prisión de entre dos y 13 años.

Después de hacer una marcha hasta llegar cerca de la plaza donde se tenía que celebrar el acto de España Ciudadana, los antifascistas se han encontrado con un fuerte despliegue de seguridad de la Policía Foral de Navarra y también de la Guardia Civil que les ha impedido el acceso. A continuación, varios asistentes al acto de Cs han ido llegando al municipio desde todo el Estado protegidos por los dispositivos policiales. Los antifascistas les han dedicado algunos insultos y consignas reivindicativas mientras los españolistas los saludaban aumentando la tensión.

Durante los diversos parlamentos del acto de Cs, los antifascistas lo han intentado boicotear: primero haciendo sonar las campanas de la iglesia de forma continuada y, después, con un concierto improvisado a menos de 100 metros de la plaza donde se encontraban los españolistas.

En el acto, que ha contado con la presencia del líder de Vox, Santiago Abascal, han participado Beatriz Sánchez, una víctima de ETA, el filósofo Fernando Savater y el presidente de Cs, Albert Rivera. Este último ha reivindicado el derecho de poder ir "a cualquier lugar de mi país", ha cargado contra "los agresores" de los dos guardias civiles y sus parejas y ha asegurado que "los valores de la democracia no son compatibles con los contravalores del nacionalismo".

Una vez terminado el acto españolista, sus asistentes han salido escoltados por el dispositivo policial debido a la presencia de los antifascistas y la tensión existente entre ambos bloques. La Guardia Civil ha sido el cuerpo policial encargado de permitir la salida del pueblo de Rivera y Abascal frente a los antifascistas que cantaban "que se vayan" y "español el que no bote".