La activista y sindicalista catalana Lola Gutiérrez ha sido condenada hoy a Atenas a 17 meses de prisión por tentativa de contrabando de personas y uso de documentación indebida, después de intentar ayudar a un menor refugiado a salir del país en el 2016, si bién el tribunal ha acordado eximir-la de complir la pena.

El Tribunal de Apelaciones de Atenas, donde se celebró el juicio en ausencia de Gutiérrez, ha tenido en consideración que la propia acusada se hubiera declarado culpable y pidiera que la naturaleza humanitaria del acto se considerara un atenuante.

"Es una pena muy baja, justo nuestro objetivo. La jueza ha aceptado los motivos humanitarios que llevaron a Lola a actuar así. Es un paso positivo para cambiar la legislación y aliviar las penas en los casos en los cuales se actúa por solidaridad, y en este sentido es decisivo para descriminalizar la solidaridad", ha declarado a Efe su abogado, Panayiotis Papayeoryiu.

Juicio en ausencia

Gutiérrez no pudo asistir al juicio, que se celebró en ausencia, ya que pesa sobre ella una prohibición de entrada en el país hasta el 2023, después de ser expulsada en el 2016. De entrar en el país habría sido detenida. Sí acudieron en su nombre familiares, amigos y representantes de la Confederación General del Trabajo (CGT), de la cual Gutiérrez es delegada sindical a la Diputación de Barcelona.

El secretario general de CGT Catalunya, Ermengol Gassiot, ha afirmado en Efe que desde el sindicato están "convencidos de lo que Lola hizo" es una "muestra de solidaridad" a la cual dan apoyo y comparten. Gassiot ha recalcado que la acción de Gutiérrez se enmarcó en un momento de "gran sensibilización" de la sociedad española hacia los refugiados y de exigencia del cambio de las políticas migratorias vigentes, por|para lo que el activista fue "coherente" y actuó como "persona comprometida".

Detenida en el aeropuerto

La jueza que ha leído la sentencia ha recalcado que hay que poner en valor la legislación, porque está para proteger a los menores de edad. Gutiérrez se enfrentaba a penas de entre 5 y 10 años de prisión después de haber intentado ayudar a Ayad, un menor kurdo, a salir de Grecia para reunirse con la familia en otro país europeo. Para eso intentó hacerlo pasar por su hijo en el aeropuerto, utilizando sus documentos de identidad, pero fueron descubiertos y detenidos.

Después de su detención, Gutiérrez pasó varios días en un centro de internamiento para extranjeros (CIE), a pesar de haber quedado en libertad sin fianza con cargos. Gutiérrez fue expulsada y declarada "persona peligrosa para la seguridad nacional" por la policía helena, por|para lo que se le prohibió su entrada al país hasta el 2023.