Tensión entre accionistas a la primera junta general del Banco Sabadell fuera de Catalunya, después de que el día 5 de octubre la entidad decidiera mover la sede a Alicante. Durante el turno de intervenciones, uno de los accionistas, Víctor Baeta, se dirigió al presidente de la entidad, Josep Oliu, para pedirle que abogue por la libertad del presos políticos y por la democracia. Baeta pedía al banco ser un "agente estabilizador" y aseguraba que "la señora Merkel y el Banco Central lo entenderán y, en estos momentos, lo agradecerán".

Otros accionistas presentes en la sala no se han tomado bien la intervención y lo han mostrado abucheando y silbando a Baeta. También se han oído gritos de "Viva España", seguidos de 'vivas' entre el público, que han complicado el final de su intervención. Oliu ha intervenido a continuación intentando acabar con la polémica. "Tranquilos, que el banco no tiene ni tendrá nunca posición política", ha asegurado.