Improbable
Que es difícil o poco posible que sea
Posible
Que puede ser o suceder
El presidente de la Generalitat Valenciana Ximo Puig ha cerrado el curso político valenciano con una muestra de ambigüedad calculada respecto de un adelanto de las elecciones autonómicas de 2019. Utilizando expresiones como “no hay motivos para ese adelanto, pero sería absurdo decir que no existe ninguna posibilidad”, el presidente solo ha hecho que recordar que tiene potestad para adelantar unos comicios que desde la restauración democrática se han celebrado cada cuatro años con el mismo calendario que rige para la mayoría de autonomías, todas salvo las históricas Catalunya, País Vasco, Andalucía y Galicia, que tienen convocatorias propias.
Utilizar los adjetivos “improbable” y “posible” para definir el futuro próximo del País Valencià, abre la puerta a la especulación y la incertidumbre. El gobierno de la Generalitat Valenciana está compuesto por el PSPV y Compromís y tiene del apoyo parlamentario de Podem.
Entre las tres fuerzas suman 54 diputados en Les Corts Valencianes -PSPV, 23, Compromís 19, y Podem 12-. Esta aritmética les ha permitido desarrollar un pacto político que ha funcionado bien durante los tres años que llevamos de legislatura. El llamado pacte del Botànic ha conseguido revertir la imagen corrupta de las instituciones valencianas e implementar una serie de iniciativas legislativas de amplio calado social. Los otros 45 diputados del arco parlamentario, hasta completar los 99, se los reparten el PP, 30, Ciudadanos, 9 y otros 6 en el Grupo de No Adscritos.
La ciudadanía, primero
Es importante recordar la actual correlación de fuerzas pues, a priori y en este caso el PSPV, no puede presumir de una solvencia electoral tal como para encontrarargumentos con los que justificar la necesidad de un adelanto electoral. Las iniciativas legislativas a favor del rescate de las personas no admiten paréntesis, los presupuestos anuales van saliendo y la infrafinanciación del País Valencià seguirá existiendo, pues el gobierno del Estado siempre tiene otros asuntos prioritarios, muy a pesar del innegable esfuerzo de Puig de visibilizar esta realidad y el mérito de haber incorporado a esta causa a los principales representantes sociales.
Las elecciones municipales y autonómicas valencianas están previstas para el 26 de mayo de 2019 y, aunque de manera inusitada, presidencia de la Generalitat ya ha licitado el dispositivo presupuestario que pone en marcha el proceso electoral, además de los argumentos sociales expuestos anteriormente, que no aconsejan un adelanto electoral, hay otros de carácter político que cabe recordar.
Compromís y Podem sin candidatos
Compromís, todavía no ha celebrado su proceso de primarias para la elección de candidatos y, aunque será el gran rival del PSPV con el objetivo puesto en la presidencia de la Generalitat, la lealtad pública que se han mostrado Ximo Puig y Mónica Oltra saltaría por los aires si, el presidente, no fuera leal con su socia de hoy y rival de mañana.
Algo similar ocurre con Podem que, recordemos apoya al gobierno en Les Corts. Tampoco ha iniciado su proceso asambleario de elección de candidatos y, aunque Compromís ya le ha dejado claro que no habrá confluencia electoral previa como en 2015, el apoyo de esta fuerza política seguiría siendo imprescindible para legislar en un nuevo parlamento surgido de las elecciones.
El PSPV más autonómico que federal
Ximo Puig es un valencianista convencido, pero el PSPV no es el PSC. Y aunque él quisiera hacerlo más federal que no autonómico, lo cierto es que, hoy por hoy, la férrea estructura del partido a nivel federal pesa y nada se mueve sin el visto bueno de la ejecutiva de la calle Ferraz en Madrid.
Quien ocupando en este momento un puesto elevado, como es el caso del presidente Puig, no actuara de forma modesta y benévola, podría obtener fracaso a medio plazo.
Bastante tiene la ciudadanía con despejar su futuro inmediato de si le renovarán el contrato laboral, si Hacienda le devolverá su dinero de la declaración de la renta y otras realidades como para introducir en su dieta diaria situaciones” improbables” pero ”posibles”. Confucio decía: “el cielo ayuda al que se entrega, los hombres ayudan al veraz”