Manuel Mata Gómez (València 1959), es abogado y político perteneciente al PSPV-PSOE y adscrito a la corriente Izquierda Socialista. Actualmente es Síndic y portavoz de su grupo en Les Corts Valencianes. Es un socialista veterano que en el  año 2012 le disputó a Ximo Puig, la secretaría general del PSPV y también se enfrentó con él al dar apoyo a la candidatura de Pedro Sánchez y cuando Mariano Rajoy llegó a la presidencia del gobierno español con la abstención del PSOE. No obstante, sorprende la confianza en que le muestra  Ximo Puig, actual Presidente de la Generalitat, a pesar de las evidentes discrepancias entre ellos, que vienen de lejos.

P. Al hacerse pública la designación de Quim Torra como candidato a la presidencia de la Generalitat de Catalunya, Miquel Izeta, primer secretario del PSC, ha dicho de él que es un sectario. ¿Ya no se estila la cortesía parlamentaría?

R. Si alguien analiza brevemente la trayectoria de Torra, e Izeta la conoce, sabe que no es flexible y más en una política tan compleja como la catalana. Si una persona no se mueve de sus criterios y no quiere tener una mirada un poco más larga, es difícil llegar a acuerdos con ella.

P. ¿Quiere decir que nada cambiará en el ámbito parlamentario catalán con un presidente legítimo?

R. El cargo cambia a las personas. Es más fácil que la democracia te cambie a ti que tú a la democracia. Yo, en estas situaciones, pongo como ejemplo los nombramientos del Tribunal Supremo Norteamericano; son vitalicios y ahora están en una carrera para nombrar gente joven. Los grandes cambios progresistas se han producido por los magistrados conservadores y al revés. La expectativa es positiva porque habrá un gobierno en Catalunya y el 155 dejará de estar. Pero creo que Izeta tiene razón.

P. Cuando Ximo Puig lo ofreció ser diputado y posteriormente Síndic y portavoz del grupo parlamentario socialista el año 2015 se hizo efectiva, por ambas partes, la expresión de "si no puedes con tu enemigo, únete a él"

R. Yo era un enemigo de Puig muy poco poderoso. Estamos hablando de una persona que casi ya era presidente de la Generalitat. Yo trabajaba dentro del partido, pero sin cargos institucionales. Había perdido todas mis batallas desde el referéndum de la OTAN. Ahora estoy en racha y las gano todas. Puig pensó que dado que la única posibilidad de gobernar, lo era en con otras fuerzas políticas de izquierdas; buscó dentro del partido una persona que tuviera buena relación personal con los dirigentes de esas fuerzas. Yo tengo una muy buena sintonía personal con Mònica Oltra, desde hace muchos años, y he sido el cojín entre el PSPV y otras fuerzas políticas.

P. ¿Qué lo interesa a usted de la política?

R. Lo que menos, la liturgia del poder. Sin embargo, estar en los espacios de decisión sí. Y ahora estoy.

MANOLO MATA PSPV2

P. Qué queda de la corriente Izquierda socialista a su partido?. ¿En qué se concreta?

R. Queda todo. Las propuestas políticas y las personas. Mire usted el trabajo de Sanders en los EEUU ó Corby en Inglaterra. Todavía queda mucho por cambiar dentro de la izquierda.

P. Le pregunto dentro del PSOE

R. Todavía quedamos personas que nos identificamos con Izquierda Socialista como Andrés Perelló, que está en el comité federal, yo estoy aquí con un papel relevante en el país como número 2 del PSPV. Es cierto que en otros territorios no pasa el mismo, no tenemos la coordinación en el Estado Español que sería deseable. En Catalunya, la gente de Izquierda Socialista está muy minimizada en el PSC.

"El Estado no asume la realidad autonómica"

P. Se han cumplido cuarenta años del restablecimiento del autogobierno valenciano que ahora controla económicamente el gobierno del estado. ¿Se puede ser autónomo sin capacidad económica?

R. Hace cuarenta años era imposible soñar el grado competencial y de autonomía que tenemos ahora. La batalla del 143 y el 151 ha quedado arrumbada por la realidad. La presión de los partidos nacionalistas en los gobiernos del PSOE y el PP han conseguido una estructura federal, y las patas del estado del bienestar: educación, sanidad, servicios sociales, están en las comunidades autónomas. En Castilla la Mancha, no podian soñar que gestionarían la sanidad, por ejemplo. Cuál es el problema?. Que el Estado español, no ha asumido esa realidad. Lo que sigue haciendo es disponer del pastel de ingresos económicos y dejar un trozo para que las comunidades autónomas se maten entre ellas para reivindicar trozos del pastel más grandes.

P. ¿El Estado, tiene vida propia y no se cree el estado autonómico?

R. Exacto

P. ¿El futuro de las personas se juega en los parlamentos?

R. Si. Sobre todo, en el caso de esta geometría endiablada donde no hay mayorías absolutas y tienes que forzar espacios de acuerdo entre las fuerzas políticas.

"El plurilingüismo se una apuesta definitiva"

P. Digame tres iniciativas parlamentarias por las cuales tendrían que ser recordados los parlamentarios del PSPV de la actual legislatura en el Pais Valenciano?.

R. Aquí, aparte de volver a hacer de ésta una comunidad honradada; el plurilingüismo, es una apuesta definitiva. Que los niños y niñas conozcan el valenciano, el inglés y el español cuando teminen su ciclo educativo. Que en la universidad bajen las tasas y que las becas se multipliquen. Que la sanidad sea universal, de verdad, para todos. Que el coste del medicamentos no sea un castigo que haga a las personas abandonar los tratamientos. Que la renta de inclusión se generalice. Y exportar la idea de que aquí somos gente seria y que vuelvan las industrias. De hecho, estamos creciendo más que la media en España y se han creado 200.000 puestos de trabajo aunque la gente no sea consciente.

P. ¿Y un reto de futuro?

R. Que se vuelvan a pagar salarios dignos.

P. ¿El empresariado valenciano se entiende con un gobierno de izquierdas?

R. Con el presidente Puig seguro. Durante años, aquí ha habido una sumisión intolerable por parte de las cámaras de comercio y de las organizaciones empresarial ante un gobierno del PP que les manipulaba. Han pasado de una situación de pánico pensando que la izquierda y Podemos, "no sé que harán",  a encontrarse con una estructura en la que el presidente es un gran interlocutor de los poderes empresariales y económicos, que explica los acuerdos de gobierno y entiende sus reivindicaciones. Ahora los empresarios, están comprometidos con la lucha por una mejor financiación y ya no hay relación de sumisión.

P. ¿Tres años después del pacto del Botánico y del gobierno PSPV-Compromís, con el apoyo de Podem, el 6% de los valencianos todavía cree que gobierna el PP? ¿Qué impresión le da?

R. Es sorprendente que en la época de la humanidad que más información tenemos, sabemos menos de las cosas. Responde a que no tenemos un servicio público de comunicación. Mucha gente no lee y se informa mediante cuatro tuits. Es muy preocupante. Las personas han entendido perfectamente lo que es la estructura de poder central del Gobierno de España y sabe lo que es su ayuntamiento, pero la autonomía está en un terreno de nadie que hace que no sean conscientes que los transportes públicos, los colegios donde van sus hijos, y los hospitales donde los tratan las enfermedades están gestionados por la Generalitat.

P. Usted ha tenido que escuchar alguna vez aquello de que todos los políticos son iguales?.

R. Sí. Eso es una de las grandes victorias de la derecha política, económica y social.

P. ¿Cómo se quita de encima de ese mantra?

R. Con información, constancia y actuando de manera diferenciada.

"Me encantaría ser el abogado de Puigdemont"

P. ¿Usted es abogado, aceptaría la defensa de Carles Puigdemont y del resto de presos?

R. Me encantaría. Es uno de los mejores retos de la historia judicial.

P. ¿Usted le habría recomendado que vuelva?

R. No lo sé. Puigdemont, tiene una estrategia mediática exitosa con la internacionalización del conflicto. Si el gobierno de España hubiera actuado demotra manera, estaríamos ahora en una época mucho más tranquila. Las respuestas políticas tienen sus consecuencias. Cuando la gente frivolizaba respecto del Estatuto de Catalunya en el 2006, votado sin pasión por los ciudadanos, que rompía España.. haber anulado ese estatuto sí rompió España.

P. ¿Esa acción política del gobierno de España, ha tenido más consecuencias que la declaración unilateral de independencia del Parlament de Catalunya?

R. Doce años después estamos en una situación irresoluble. L'Estatut no contemplaba todas las expectativas de todos pero era asumible y habría dado una cierta tranquilidad durante 30 ó 40 años a Catalunya, cuando el índice de aspiración independentista estaba en torno al 15%. Cuando cae el Estatuto y se cierran todas las puertas para buscar fórmulas de  encaje Catalunya, ya no es el 15% si no el 49% ó el 51%. La sentencia de 2010, rompió muchísimas cosas.

P. ¿Tiene lógica mantener a estas personas en la prisión de manera preventiva?

R. Para mí no. en absoluto. En España se ha frivolizado la prisión provisional. En el caso de estas personas no se dan las situaciones de repetir lo que hicieron, ni el riesgo de fuga.

"El PSPV quiere reeditar el pacto del Botánico"

P. Las encuestas que están publicándose de cara a las elecciones autonómicas de 2019, son contradictorias. Unas le dan el PSPV una bajada respecto del 2015, otras que será el partido más votado... Sólo coinciden en que Ciudadanos tendrá la llave del gobierno. ¿El PSPV gobernaría con Ciudadanos?

R. Creo que es una hipótesis que nunca llegará a consolidarse. Las encuestas dicen que hay cuatro partidos políticos valencianos que pueden obtener el 20% de los votos cada uno, y una quinta que puede obtener el 10% ó el 12%. Si el eje izquierda derecha se mantiene, la suma de 50 diputados para conformar gobierno será posible, tanto si lo hacen Ciudadanos y PP, como si lo hacemos PSPV, Compromís y Podemos. El discurso de Ciudadanos está muy lejos del PSPV; ellos hacen un ejercicio permanente de democracia demoscópica; hacen y desde hacen, según lo que creen que la gente quiere. Además, su modelo autonómico está en las antípodas del PSPV. Que nadie dude que, por nosotros, reeditaremos el pacto de gobierno del Botánic.

P. ¿Y si Compromís superara en votos eal PSPV, contempla la posibilidad de Mònica Oltra, presidenta de la Generalitat, y Ximo Puig, vicepresidente?

R. Yo creo que las fuerzas de Compromís y las de Podem, saben que para consolidar este proyecto de izquierdas hace falta que esté encabezado por el PSPV y lo digo porque existen muchas resistencias, dentro de la sociedad valenciana, ante decisiones que toma Compromís. La gente joven de este partido sabe que no podrían encabezar un proyecto político con viabilidad. Le pongo un ejemplo: las propuestas del conseller Marzá respecto de los temas de Educación son sensatas, de acuerdo en lo que pide el PP en Catalunya; pero hay una ofensiva contra el valenciano que, es tan poderosa, que vale la pena que alguien haga de mediador. En este aspecto el papel de Ximo Puig no se agota en cuatro años. Si metiéramos dentro de un sobre cerrado qué es lo que quieren los electores de PSPV, Compromís y Podemos, dirían que mantener la situación actual.