En 1962 Sarnoff Mednick publicó la teoría asociacionista de la creatividad. Este psicólogo del Bronx pensó que había identificado la esencia de esta capacidad: memoria asociativa que trabaja excepcionalmente bien. E hizo un test, llamado de asociación remota, que todavía se utiliza en los estudios sobre creatividad. Pondremos un ejemplo: República Dominicana, corrupción, fuga. ¿Me pueden decir qué palabra se asocia a estas tres? No hay que ser muy creativo para responder: rey. Y no hay que estar conectado permanentemente a las noticias para saber que hablamos de Juan Carlos I. Ahora bien, esta asociación de ideas tan sencilla no liga nada bien con el gris de la respuesta de los poderes del Estado, la creatividad de la cual ha brillado por su ausencia, aunque esperada. Porque, claro, el Estado es una monarquía parlamentaria. Lo dice el artículo 1 de la Constitución: "La forma política del Estado español es la monarquía parlamentaria". Y no es otro que "Juan Carlos I, Rey de España" quien anuncia su aprobación. Y ahora es una Constitución firmada por un presunto corrupto y un fugado de la justicia. ¿Cómo se aguanta esto? ¿Qué deben hacer, pues, los poderes del Estado si el jefe del Estado, que es el Estado mismo, es el fugado?

El Reino de España no es homologable internacionalmente, ni creíble para sus ciudadanos, si el fundador del régimen es un corrupto, como ya lo fue el anterior jefe de Estado

Pues aunque no lo parezca, tienen una gran oportunidad. Una oportunidad de ser, mínimamente, creativos. Primero, los jueces del Supremo, aunque sea la sala de vacaciones, deben emitir una orden de búsqueda internacional y que el emérito sea juzgado. Y también Felipe VI, por encubrimiento. Es imprescindible. Pero es necesario también un referéndum sobre monarquía o república y un cambio constitucional. Porque el Reino de España no es homologable internacionalmente, ni creíble para sus ciudadanos, si el fundador del régimen es un corrupto, como ya lo fue el anterior jefe de Estado, por cierto, que es quien lo enchufó en el cargo. España está ante la gran oportunidad de regenerarse, que significa también resolver de una vez por todas el encaje o el adiós de Catalunya. Tenga en cuenta que los ciudadanos de Catalunya votaron un Estatut que 11 jueces y un muerto consideraron que no cabía en esta Constitución firmada por un corrupto. Es una gran oportunidad para resolver la crisis política que ha llevado a medio Govern de la Generalitat al exilio y medio a la prisión, y los presos y exiliados deben formar parte de la solución, que debe terminar con un segundo referéndum sobre la independencia.

Lo que me temo es que de animales políticos y con sentido de Estado, aunque algunos a veces quieran imitar a Winston Churchill, en España hay exactamente el número que precede al 1 en una serie numerada.