Tal día como hoy del año 1924, hace 100 años, en Barcelona; moría el doctor Josep Antoni Barraquer i Roviralta; que fue el pionero de la oftalmología en Catalunya y en el conjunto de la península Ibérica. Nacido en Barcelona en 1851, en una familia de tradición médica, estudió y se licenció en medicina en la Universidad de Barcelona (1877); fundó un dispensario en el Hospital de la Santa Creu (1879); se adentró en el mundo de la oftalmología y fue el primero en hacer cortes en serie de la región orbitaria ocular, que serían una base fundamental para el conocimiento anatómico del ojo. Posteriormente, se marchó a París para estudiar enfermedades oculares, y al volver a Barcelona (1880) fundó el primer servicio de oftalmología de Catalunya y de la península Ibérica.

En 1888 propuso al Gobierno la implantación de los estudios de oftalmología en las facultades de medicina. Pero tuvieron que pasar muchos años hasta vencer las desconfianzas de los gobiernos españoles. Durante aquel tiempo de espera, el doctor Barraquer fundó la Sociedad Oftalmológica de Barcelona (1903) y la revista especializada Boletín de la Clínica Oftalmológica del Hospital de la Santa Creu (1908), que serían pioneras en su género en la península Ibérica. Un cuarto de siglo después de aquella primera propuesta, la Universidad de Barcelona obtenía autorización para abrir la primera cátedra de oftalmología de Catalunya y de la península Ibérica (1914), y el doctor Barraquer era nombrado primer catedrático de aquellos estudios.

Durante su larga y provechosa carrera ideó nuevas técnicas de extracción extracapsular y de cataratas (haciendo buena la larga tradición oftalmológica catalana iniciada por el doctor Cresques Abiatar —de Lleida— que a finales del siglo XV fue el primer cirujano catalán y uno de los primeros de la historia a intervenir de cataratas). El doctor Barraquer fue un experto micrógrafo (uso de microscopios para realizar fotografías) y entre sus trabajos destacarían los dedicados a la histopatología (observación en el microscopio de células y tejidos afectados por una enfermedad) sobre lesiones oculares, morfología normal y anatomía topográfica. El doctor Barraquer fue, también, el iniciador de una prestigiosa estirpe de médicos oftalmólogos que ha trascendido hasta la actualidad.