Es uno de los titulares que ha dejado Xavier Vendrell a Catalunya Ràdio, en la primera entrevista nada más salir de los calabozos, después de dos noches en el cuartel de la Guardia Civil. La detención se produjo en su casa, en Sant Joan Despí, en presencia de su compañera y sus tres hijos. La acusación, una confluencia de temas sin ninguna conexión aparente. Desde la trama rusa, pasando por su actividad empresarial, al Tsunami Democràtic. A ciencia cierta sólo sabemos de su implicación en el referéndum del 1 de octubre. Entre otros, porque él mismo lo había explicado en el Faqs de TV3 un par de años atrás. Como también lo había hecho otro de los detenidos, Oriol Soler. En este caso en RAC1. De Vendrell es conocida su actividad política, fue conseller del tripartito. Su compromiso político arranca de la más tierna juventud aunque hoy sólo es un militante de base de ERC. A Soler se le atribuye proximidad a ERC aunque no ha sido nunca militante. Sí que fue uno de los impulsores de la COP de Ripollet, formación que gobierna Ripollet después de echar al PSC. Tanto uno como el otro no viven de la política sino de su actividad privada. En el caso de Soler siempre ha sido así, nunca ha tenido ningún cargo en la administración.

Soler es sobre todo un emprendedor precoz, con 18 años ya fundaba empresas y con los años se ha erigido como un visionario que ha innovado en todos los ámbitos de la cultura no resistencialista. Es decir, alguien que ha demostrado que la lengua no es un problema para hacer negocio y que en catalán se puede hacer de todo o casi de todo. Con una premisa, talento, un buen producto para competir en el mercado. Él es el creador del Descobrir Catalunya, del Descobrir Cuina y del Sàpiens. También del Nat, una revista de ciencia que si bien no triunfó fue el primer intento de hacer una revista pensada comercialmente para todos los Països Catalans. Por si no fuera suficiente se inventó un diario. Era una manía suya de hacía muchos años, se lo había oído explicar personalmente ya en el año 2000. Lo conozco desde que tengo quince años. "Catalunya necesita un medio de comunicación potente e influyente", nos decía a algunos. Y añadía que "lo tenemos que hacer", ante el asombro de propios y extraños, que nos pensábamos que estaba en las nubes. Y es así que al cabo de unos años nació el diario Ara, únicamente por obra y gracia de su talento. Como nunca tiene suficiente creó la editorial Ara Llibres, que hoy es líder de no ficción en catalán. Esta semana uno de sus libros, el Tornarem a vèncer de Marta Rovira y Oriol Junqueras, se situaba en el primer lugar del ranking de ventas.

Tanto uno como el otro son dos personas con criterio, inteligentes, honestos y unos patriotas de pies a la cabeza. En la entrevista que hicieron en el Faqs evidenciaron una capacidad discursiva admirable, una coherencia chocante y un rigor que ojalá empapara el conjunto del movimiento independentista propenso a dejarse seducir por necios capaces de todo tipo de burradas. Sólo hay que recordar algunos de los comentarios o artículos infectos que hemos oído a lo largo de los últimos meses sobre Tsunami Democràtic que tendrían que provocar vergüenza a sus autores disfrazados de pata negra del independentismo. También aquí estuvo brillante Soler cuando respondió sobre su participación en la iniciativa Tsunami Democràtic.

Ojalá este país tuviera más hombres y mujeres como Oriol Soler y Xavier Vendrell, verdaderos faros en un momento de desorientación y miopía política tan perjudiciales para el independentismo. Criterio, astucia, determinación y una capacidad admirable para tocar de pies en el suelo y repensar el futuro con la voluntad de ganar.