Mear en la Gran Vía

"La política es el arte de disfrazar de interés general el interés particular"
Edmond Thiaudière

A pesar de la repugnancia intrínseca que se siente con cada capítulo de la obscena película La fontanera, la sobrina y otras cosas del meter… y del matar, y las que aún vendrán, cada vez cunde más la sensación de que no habrá nada que haya hecho que consiga poner al Gobierno frente a la espada y la pared. Woodward y Bernstein estrellándose contra la pared del bulo y el pseudomedio. ¿Qué tiene que pasar para que se avergüencen? La realidad constatada es que Sánchez podría plantarse en el centro de Gran Vía a mear a la concurrencia y aun así, como auguraba Trump, no sería castigado por sus electores ni por sus socios.

Lo de la búsqueda de material con que chantajear o destruir o banear a los adversarios políticos que acaba de saltar en forma de grabación no es nuevo. Hace ya un año que se nos advirtió de que la brigada tuberías andaba buscando y rebuscando a ver si encontraba basura de periodistas, jueces, fiscales y, como vemos, hasta de guardias civiles. Guerra sucia contra disidentes, críticos o funcionarios que hacen su trabajo y que fastidian. La buena noticia es que hay más gente decente de la que creen en ese partido porque no parece que la mafiosa estrategia les haya dado para parar nada, para frenar a nadie o para salvar al que tocaba.

Reconozcan que frente a los desmanes instigados por Fernández Díaz, los micros ocultos en coquetos floreros de restaurantes de alto copete y los encuentros en la tercera fase con banqueros en los bancos del parque, esto apesta no solo por la corrupción que supone sino por la torpeza y la falta de clase, propia de porteros de tugurio, destrancadores por encargo y demás fauna. Habrá más. Será difícil desligar a la que se permitía a voz en grito ofrecer capotes de la Fiscalía y la Abogacía del Estado para beneficiar a los presuntos delincuentes del partido en el que aún no le han abierto ni expediente. Añadan que como marca de la casa, si obtenían algo, tampoco cumplían, de ahí que haya tanto personal cabreado con cosas para sacar.

Varias fuentes, no presentes en la grabación, afirman que desde hace más de un año hay en marcha una operación turbia capitaneada por una militante socialista navarra próxima a Santos Cerdán. El plan pasaba por buscar personas dispuestas a declarar o a aportar material para comprometer o desprestigiar o cancelar a objetivos políticos del PSOE. Para ello se han movido entre las víctimas de Villarejo, las de Fernández Díaz, empresarios imputados, etcétera, que pudieran aportar mecha para incendiar campañas o armar causas, sin que se excluyan otras. Al menos eso es lo que cuentan varios de los contactados. A cambio, como hemos oído, una militante socialista, sin aparente autoridad para hacerlo, promete cosas: desde protección a favores judiciales a cargo de la Fiscalía y la Abogacía del Estado e incluso beneficios económicos en otros casos. Una militante que llega a decir a un prófugo que los fiscales viajan, a Dubai si hace falta. Todos perciben que lo que está ofreciendo es la red de poder socialista, que se trata de alguien que puede pedir que se activen esos resortes.

La fontanera ha reconocido que se trata de su voz. Dice en su descargo que se trata de una investigación periodística. No solo sucede que ningún periodista trabaja así, y ningún chorizo se creería a un simple periodista que ofreciera esas cosas, sino que, de ser una trapacería puramente personal, ya debería el partido haber metido en cintura a la militante que ha rebozado en fango al secretario general, al ministro de Justicia y al fiscal general del Estado como poco. ¡Qué digo, si en algunos casos ha hablado del número 1! Lo mínimo es expedientarla y expulsarla por un comportamiento inadmisible. Silencio. Solo Patxi López ha pronunciado un escueto: "Si es verdad lo que se escucha, me parece absolutamente rechazable". Al menos no ha negado conocer a una señora que se ha fotografiado cenando con Begoña Gómez, con todos los líderes del partido, y que ha sido cazada saliendo a una cita desde Ferraz y volviendo al terminar a la sede del PSOE. Patxi, como todos, sabe de la relación de Leire con el secretario de Organización, al que, en último extremo, parece que pretende proteger del famoso informe de la UCO. La excusa es tan peregrina como la del letrado que la acompañaba —Jacobo Teijeilo, abogado de Sito Miñanco—, en cuyo despacho se llevó a cabo la videoconferencia sin que este le dijera a la fontanera, muchacha no prometas esas cosas que te metes en un lío y a lo mejor te están grabando. No se sabe para qué investigaba para su libro con tanto abogado al lado. Un fontanero siempre cierra la llave de paso antes de meterse en faena.

Varios de los que se prestaron a colaborar en esta red de fango se han hartado, se sienten engañados y comienzan a contar lo que pasó

No se extrañaran de que tan sucia actividad fuera además una trampa para conseguir cosas sin dar nada a cambio. Varios de los que se prestaron a colaborar en esta red de fango se han hartado, se sienten engañados y comienzan a contar lo que pasó. Con la falta de prudencia que se deduce del fragmento que hemos visto con el de Dubai, no duden de que todo el proceso estará documentado por unos y por otros. Están los que captan chivatos, los que prometen, los que presionan y los presuntos beneficiarios políticos de la red y "a partir de aquí, coordinación", como dice Leire Díez, alias la fontanera, desmontando cualquier posibilidad de que actuara como periodista. Los periodistas no nos coordinamos sino con nuestro jefe y eso, a veces.

Había que matar a la UCO porque la UCO lleva desmontando la corrupción de todos los partidos una eternidad. ¿Quién defiende a la UCO? No será su ministro, ¡quia!, Marlaska ha salido sacudiéndose el polvo del camino y diciendo que si hay que investigar algo ya lo hará el juez, que para eso actúan como policía judicial. Seguro que el honor de la unidad será restañado por la directora general de la Guardia Civil, ¡venga, hombre, que esta ha sido delegada del Gobierno y diputada socialista! Silencio. El que calla otorga. Mucha mierda, que se dicen los artistas. En los medios afines ni lo mencionan, como si no fuera noticia que una militante socialista ande buscando material contra el teniente coronel jefe de la unidad que está a punto de presentar las pruebas de cargo contra el número dos de partido. ¡Qué más da si te puedes aforar a la carrera obligando a cuatro personas que han sido votadas a quitarse de en medio para ponerte tú!

Mear en la Gran Vía es poco, hasta disparar como Donald, podría.