Este fin de semana he asistido a mi primer congreso como afiliado de Junts. Los discursos de todos los que intervinieron me representaron, muy alineados con la necesidad de culminar la independencia y con reanudar aquello que empezamos el 1 de octubre del 2017.

Como recordó la presidenta Borràs, cinco años después del 1 de octubre, no ha desaparecido ninguno de los motivos que nos llevaron a hacerlo, al contrario. ¿Qué ha pasado desde entonces? Dos años de fuerte represión, falta de acuerdo entre Junts y ERC durante el Govern Torra, dos años de pandemia y un año de mesa de diálogo sin ningún tipo de frutos.

También quiero destacar el momento en que el nuevo secretario general Jordi Turull mencionó que tenemos que pasar del "o referéndum o referéndum" al "o independencia o independencia".

Estos discursos los escuchaba habiendo participado en los últimos días en la confección de la ponencia política que justamente va en esta línea de culminar la independencia, y de hacerlo cuanto antes. Las bases ahora podrán hacer enmiendas, pero estoy seguro de que en ningún caso será para diluir, sino todo lo contrario, probablemente pedirán más concreción.

Si volvemos a confiar en nosotros y pensar que todos merecemos una segunda oportunidad, estoy convencido de que esta será la definitiva

De este modo, Junts se convertirá en el único partido que quiere activar la declaración de independencia, previa preparación de las acciones que sean necesarias para que esta vez tenga éxito. Tenemos que recordar que ERC ratificó el mes de marzo una ponencia donde reforzaba el papel de la mesa de diálogo durante dos años, y la CUP ha propuesto un nuevo referéndum para el 2025. Junts, insisto, será, si se aprueba la ponencia presentada por la ejecutiva actual, el único partido que formalmente quiere activar la declaración de independencia.

Verán qué poco tardan las cloacas del Estado en trabajar para que Junts fracase en el intento, seremos el chivo expiatorio de todo el mundo: de medios de comunicación afines al régimen, de los partidos unionistas, posiblemente de independentistas a los cuales les incomoda este nuevo posicionamiento y, también, de muchos independentistas que no nos creen capaces de cumplir lo que proponemos.

En todo caso, los hechos lo demostrarán. Según describimos en la propia ponencia, en los próximos meses habrá acciones concretas en el Parlament, en el Govern y en otros espacios que demostrarán esta voluntad, y espero que los que nos queréis dar un voto de confianza, nos ayudéis y cerréis filas para que lo consigamos.

Es cierto que Junts no dispone de 68 diputados y no podremos hacer nada solos, pero, en todo caso, espero que nuestro posicionamiento pueda arrastrar a otros partidos independentistas a acordar una hoja de ruta conjunta como se hizo en 2015 y que la sociedad civil vuelva a sumar, porque sólo juntos ganaremos.

Las presiones para dividirnos dentro de Junts y entre partidos y sociedad civil han sido, son y serán muy fuertes. Si volvemos a confiar en nosotros y pensar que todos merecemos una segunda oportunidad, estoy convencido de que esta será la definitiva. El único objetivo es la culminación y nos tenemos que centrar en eso y no caer en ninguna provocación.

 

Joan Canadell, diputado y miembro de la ejecutiva de Junts per Catalunya