El diario Público ha desvelado esta semana que fue la intervención de Miquel Iceta quien paró las cargas del 1 de octubre. Según una pieza publicada por Patricia López y Carlos Enrique Bayo, el líder del PSC llamó a Soraya Saénz de Santamaría, entonces vicepresidenta del Gobierno, amenazándola con convocar a su gente a ir a votar si no paraba la violencia de la Policía y la Guardia Civil.

Iceta ha reconocido la llamada, ha explicado que la conversación fue muy dura, pero ha negado la amenaza porque "habría sido una incoherencia con la postura que había defendido hasta aquel momento: estábamos en contra de la convocatoria y pensábamos que no valía para nada".

¿Qué pasó realmente? ¿Especulamos?

Pongo la mano en el fuego por Patricia y por Carlos Enrique. Gracias a su trabajo, por ejemplo, sabemos quién es realmente el excomisario Villarejo y gracias a ellos, seguro, algún día sabremos hasta dónde llegan realmente sus tentáculos y por qué algunos le ríen las gracias a este individuo en público y en privado. Y hablo de políticos, policías, periodistas...

O sea, descarto que hayan inventado (o "tuneado") la noticia para "blanquear" a Iceta.

Con esta historia de la mediación-amenaza, Iceta tenía una oportunidad de ponerse una gran medalla. Y negandola, ha rechazado hacerlo. Y eso en un político sorprende porque aprovechan cualquier oportunidad para hacerse quedar bien a sí mismos. Por lo tanto, o bien Iceta dice la verdad y quien le atribuye la gestión ha intoxicado a los periodistas o bien no dice la verdad y prefiere no quedar como el salvador de nada porque considera en que eso lo perjudica electoralmente y políticamente. Como le pasó cuando durante la última campaña electoral pidió el indulto para los presos políticos y eso, dicen, le costó 4 diputados.

La fuente de la noticia es el gabinete de crisis del 1-O, por lo tanto es el gobierno del PP. ¿Por qué el PP, o mejor, dicho, una parte del PP, tendría que querer hacer quedar bien a Iceta? ¿No, verdad? Por lo tanto, si no se trata de hacer quedar bien Iceta, ¿podría ser que una parte de aquel gobierno utilice una conversación de Iceta para ajustar las cuentas con la otra parte? Dicho en plata, ¿puede ser que el sector Soraya diga ahora que Iceta realizó una amenaza que quizás no fue tal para disparar un torpedo a Casado y su entorno, mucha parte del cual está formado por los enemigos de Soraya?

¿Suena factible, verdad? Sobre todo porque en la pieza de Público se habla de que en aquel Gobierno de Rajoy hubo un golpe de estado interno entre los que defendían una vía "suave" (Soraya) y los partidarios de la línea dura (Cospedal y los actuales Casadistes).

Si eso fuera así, tanto los periodistas como Iceta estarían diciendo la verdad y estaríamos asistiendo al inicio de una guerra sucia interna en el PP que nos puede dar momentos de mucho entretenimiento.