Primera previa. Para construir un edificio, primero hace falta un solar. Y después ya viene cuando lo llenan de cemento, ladrillos, ventanas, puertas y vecinos. Y al constructor tanto le da como sea el edificio y quien acabará viviendo allí. Lo que a él le interesa es llenar el agujero con pisos que después se vendan y él los cobre. Vaya, que sin solar es imposible el edificio, pero con solar puede no haber edificio.

Segunda previa. El estado español nunca se ha sentado en ninguna mesa a negociar nada. Desde hace 500 años todo lo ha solucionado por la fuerza. A favor o en contra, pero por la fuerza. Como me ha comentado hoy un admirado colega cuando hablábamos de esto: "La Reina de Inglaterra todavía se puede pasear por Australia tratándolos de súbditos. En cambio España perdió todas las colonias irreversiblemente y traumáticamente por no querer mostrar lo que ellos creían que era debilidad".

Cuando al estado español se le planteó el actual momento del conflicto catalán, los estrategas decidieron que había que aplastarlo aplicando el mismo modelo que en el País Vasco. Allí les había funcionado y no sabían aplicar ningún otro. Se trataba de 1/ de enviar varios caballos de Troya políticos y mediáticos muy bien alimentados económicamente para dividir a la sociedad y "aislar" el movimiento y 2/ y fundamental, aplicar la fuerza. ¿Problema? Sí, uno no menor: aquí no existía una violencia que justificara la fuerza. Por lo tanto, ¿qué haces cuando quieres destruir un contrario pacífico adjudicándole violencia? Pues creando un relato que lo presente como violento. ¿Aquello del solar, sabe? Repasemos:

- Los famosos plenos del 6 y 7 de septiembre rápidamente fueron calificados de pequeños golpes de estado realizados desde el autoritarismo. ¿Y el golpe de estado, cómo se hace? Con violencia.

- El 1 de octubre ha sido considerado desde el primer momento un golpe de estado para poder asociarlo con violencia.

- Los CDR, que se manifestaban con una violencia comparable a la de los taxistas que cortaron el centro de BCN durante una semana, como para poner un ejemplo, han quedado instalados en el imaginario del relato como kale borroka. Así, en euskera. Así, como si fueran ETA. Pero ojo, no estoy diciendo que los taxistas fueran violentos, sino que se manifestaban, como se ha manifestado mucha gente en este país durante años, y nunca se había considerado "terrorismo" como si se consideraron los CDR u otras manifestaciones parecidas.

- El caso de los Jordis, considerado un acto violento desde el primer momento. Todo lo que sucedió aquel día se ha derivado hacia la violencia. Y con el misterioso caso de las armas dentro de los coches policiales y a la vista de todo el mundo.

- Cuando el 1-O la gente mantuvo una actitud de resistencia pacífica, ¿qué apareció en un sumario? Que la actitud había sido violenta porque provocó la violencia que tuvieron que ejercer la Guardia Civil y la policía nacional.

- Y relacionado con el 1-O, enseguida apareció la cifra de 431 policías heridos, para instalar en el imaginario que los violentos habían sido a los ciudadanos que querían votar y que la policía sólo se había defendido.

- Las pintadas de 4 chalados, que han existido en un bando y en otro, sólo han existido en el bando indepe y han sido repetidamente magnificadas, presentándolas como terrorismo. Ah, y han llegado a ser comparadas con la noche de los cristales rotos (textual).

- El caso de un pueblo donde hubo unos incidentes menores con miembros de una familia que todo el mundo conocía como conflictiva, y que también era conocida en varios juzgados y prisiones, fueron convertidos en "intentos de quemar viva a una familia en su casa". Y, por extensión, se derivó hacia un clima de intimidación generalizado contra el disidente.

- Un incidente entre un señor que reñía a unos niños por ensuciar la calle y los padres de los niños se convirtieron en un "en Catalunya van apaleando madres delante de sus hijos".

- La agresión de un policía a Jordi Borràs al grito de "Viva Franco" y "Arriba España" pasó a ser una agresión del fotoperiodista a un pobre policía indefenso que, parece ser, Borràs había reconocido como policía sin conocerlo de nada. ¡La violencia en la calle de los indepes!

- Las reiteradas provocaciones de los pelotones arrancalazos, que acabaron cuando una señora neuronalmente incompleta hizo lo que hacía tiempos que buscaban, pero equivocando tanto el tiro que sucedió en una mani unionista y acabó recibiendo un pobre cámara de Telemadrid.

... y, una vez más, no continúo porque la lista es infinita.

O sea, el Estado tenía establecido el solar de la violencia y después sólo ha tenido que ir poniendo los elementos necesarios para construir el edificio correspondiente. Por este motivo hace más de un año que todo lo derivan hacia la violencia. Y eso incluye esto de hoy, con una rebelión que sólo puede existir, según dice la ley, si hay armas y violencia y una sedición para la cual hace falta la famosa cosa "tumultuaria".

Y como red por si les falla el relato de la violencia, ya tienen a punto el cojín argumental alternativo del "alguna cosa habrán hecho" que, resumido, sería: "A ver, esto de la sedición, la rebelión y la malversación quizás no, pero los 9 encarcelados, los de la Mesa y Trapero y su gente hicieron muchas fechorías y alguna cosita tendrán que pagar". Aunque sea para poder justificar a posteriori que ya hace un año que están en prisión.

Cuando lo que tendrían que hacer es contestar dos pequeñas preguntas: ¿Cómo es que no juzgan Puigdemont, quizás porque la justicia europea no actúa siguiendo un guion predeterminado sino aplicando la ley a los hechos? ¿Catalunya es independiente o lo fue en algún momento o resulta que ahora es delito hacer declaraciones políticas sin ningún efecto?