Hace cuatro meses que estamos con la cosa esta de la pandemia gracias a la cual teníamos que aprender tantas cosas. Todas muy buenas, nos decían. Las más teletubis ni estan ni se las espera, pero si que hay tres que las tenemos muy claras: 1/ no hacer previsiones a más de una semana vista y 2/ a falta de una vacuna, la única manera de controlar el virus es la responsabilidad individual y colectiva. La tercera viene más abajo.

La Generalitat no nos puede prohibir los desplazamientos ni ciertas actividades. Por eso "recomienda" y "aconseja". Por lo tanto, si usted vive en el área metropolitana de BCN y le apetece ir al Delta a comerse un arroz de anguila y pato, adelante, nadie se lo impedirá ni le multará. Pero sepa que en la situación actual no es lo más aconsejable. ¿Por qué? Porque existe el riesgo de que con este movimiento usted expanda el virus. A partir de aquí es usted quien tiene que valorar si pone o no su granito de arena en la construcción del bien colectivo.

Por lo tanto, con este panorama, nosotros tenemos que estar a la altura y asumir nuestra responsabilidad pero los que nos mandan, además de hacer las cosas bien y explicarse, tienen que dar ejemplo. Con una pulcritud extrema. No es admisible que un responsable público no se aplique los que nos reclama. Y si eso sucede, pedir disculpas no es suficiente.

"Mi compañero está con los niños, pero yo no me marcho, estoy aquí". Eso lo dijo ayer la alcaldesa de BCN, Ada Colau, en una rueda de prensa donde le preguntaron si era cierto lo que explicaban algunas personas que habían visto su pareja con los niños cargando el coche con maletas como para irse de la ciudad el fin de semana. Es en el minuto 28.58 de este vídeo:

Podemos discutir si las autoridades están actuando cuando y como toca y si algunas de las medidas que toman son más o menos apropiadas, pero la tercera cosa de la lista de las que nos han quedado claras es que los brotes se controlan reduciendo la movilidad. Después si quiere discutimos el equilibrio entre economía y salud o por qué podemos ir a la terraza de un bar y no a la playa o en metro y no al teatro. Pero si la alcaldesa de BCN está en una rueda de prensa diciéndole a la ciudadanía que no salga de la ciudad, no es presentable que en aquel mismo momento su familia esté huyendo de la ciudad. Si es que eso ha sido así.

Servidor, que es uno ingenuo, piensa que quizás ha sido un malentendido. Resulta que no, no salían de fin de semana sino que llevaban unas cosas a casa de un familiar. O de un amigo. Pero eso tiene una fácil solución. Este domingo por la mañana se convoca una rueda de prensa y allí se ofrecen las explicaciones pertinentes: "No miren, llevábamos sábanas a casa de una tía que nos quiere bordar las iniciales" o bien "se nos ha estropeado la lavadora e íbamos a una lavandería".

El problema será si la explicación es del tipo: "No, mi pareja y los niños se marcharon de fin de semana porque consideramos que la situación en BCN está como para huir lo más lejos posible". Primero por el ejemplo, segundo por la poca solidaridad con sus ciudadanos que o bien no tienen según residencia o bien no han ido por responsabilidad y tercero porque a partir de este momento Ada Colau nunca más tendrá autoridad moral para pedirles nada a los barceloneses.

Pues nada, como no nos podemos mover mucho, cojo una silla y espero a ver qué. Porque saldrá a dar explicaciones, ¿verdad?