Después del Sense ficció sobre las urnas del 1-O, mi amigo Pere Mas me envía un whatsapp y me dice: "Me ha gustado mucho el tono". Es un mensaje que agradezco, porque el documental que me han dejado dirigir lo ha buscado expresamente. Intentando no perder rigurosidad ni, si se quiere, épica, se puede tomar un punto de distancia e, incluso humor, para contar y contarnos nuestra historia reciente, algo que siempre da miedo a la política, así en general. Y hablo de todo el arco parlamentario. Mariano Rajoy lo clavó cuando dijo “los catalanes hacen cosas”, que ha sido el late motiv del trabajo, más allá de explicar algunos —aún sólo algunos— de los intríngulis de la pirámide clandestina que permitió hacer llegar urnas a las escuelas. Bien, también ha sido un motor la serie Allo, allo, que en el Sense ficció tiene un modesto homenaje en forma de banda sonora. Explicar y dar voz a la pirámide ciudadana, decía, era el objetivo más allá de explicar la dirección política. Porque cuando entramos en la política, entramos en la batalla del relato que, todavía hoy, todo el mundo quiere controlar. Sea como fuere, ahora que se habla de despolitizar y no sé cuántas cosas más, nada mejor para la salud democrática de un país que cuestionarse cada día. Una nación es un plebiscito diario, se atribuye a Ernest Renan.

"Una novedad del procés es que las élites jugaron como élites cuando les convino y jugaron como activistas y parte del pueblo cuando les convino"

El caso es que un trabajo periodístico, sea en prensa, radio y tele, obliga a elegir. Y como en el caso de la tele manda muchas veces el ritmo, existe una frase del filósofo Joan Burdeus, que quedó fuera del montaje final, pero que quiero recuperar: “El 1-O también representa una nueva forma de control de las élites políticas sobre la ciudadanía, utilizando técnicas de marketing y seducción para hacerse pasar por uno más de la ciudadanía. Hemos visto a políticos haciendo de activistas y de políticos a la vez, algo que no es habitual. Normalmente tenemos una concepción muy clásica. Sabemos quién es Malcom X, sabemos quién es Martin Luther King y sabemos la diferencia entre activista y político. Una novedad del procés es que las élites jugaron como élites cuando les convino y jugaron como activistas y parte del pueblo cuando les convino. En el caso del 1-O, una opinión posible es que las élites independentistas tuvieran interés en negociar y utilizaran la independencia como aglutinador emocional. También era posible que en la noche del 1-O el pueblo hubiera tomado conciencia de otra manera y hubiera hecho de contrapoder desbordando a las élites. Pero en el 1-O vemos un caso de éxito de las élites que mandaban en el procés para conseguir que la parte de abajo, más descentralizada, no se fuera de madre, no se escapara del relato, por este mecanismo de identificación emocional, en la que nunca sabías si eran líderes, estrategas de la política convencional o eran activistas, mártires o héroes del pueblo”.

No sé si Burdeus tiene razón. Me parece evidente que los políticos hacían de activistas y los activistas de políticos. Es muy posible, algunos lo han escrito, que lo que los de arriba buscaran fuera una negociación. Por ejemplo un referéndum pactado. Que, por cierto, es donde estamos. También es posible que no todo el mundo abajo —para seguir con esta terminología— quisiera que se declarara la independencia. O no todo el mundo quería una revuelta más allá de conseguir votar. Y es cierto que existe una complejidad muy grande, desde el punto de vista de las mayorías, de la homologación internacional o del miedo a la violencia de todo tipo, que unos líderes o un líder debe ponderar en su soledad en medio de una gran tensión. Pero me da la impresión de que este control final desde arriba ha marcado los últimos cinco años y todavía está latente. Y explica tanto el divorcio vertical entre abajo y arriba como el enfrentamiento horizontal entre partidos y dentro de los partidos, como hemos visto desde la Diada y hasta ayer mismo. Y el caso, como dice Burdeus, es que "estos acontecimientos históricos están abiertos durante un tiempo y eventualmente se cierran".