Hoy ha tenido lugar una reunión entre el presidente del Parlament de Catalunya, Roger Torrent, y el jefe de los Mossos d'Esquadra, a pesar de encontrarse ahora mismo bajo el mando directo del Ministerio de Interior (por la vigencia del artículo 155 de la Constitución). 

Los altercados han comenzado este fin de semana, y sin poder determinar aún qué grado de veracidad pueden tener las informaciones publicadas al respecto de los infiltrados en ellas, lo que se ha puesto de manifiesto es que han aparecido nuevos perfiles entre los manifestantes, concretamente: un manifestante que lleva mochila, capucha y varios objetos para tirar contra la línea de contención policial como el gas pimienta.

Bien, ya lo he comentado en redes sociales y lo repito ahora: si el pueblo soberanista catalán se ha ganado los apoyos y lo seguirá haciendo es por su defensa pacífica y democrática de un proyecto republicano. No caigamos en trampas ni en provocaciones: la República se defiende a cara descubierta y de manera pacífica siempre

Piensen por un momento a quién pudiera interesarle que hubiera violencia en las calles de Catalunya. Violencia, sí. Eso que falta para poder considerar que los presos políticos puedan ser considerados culpables de delitos como la rebelión. 

A quienes piensen que hay que defenderse de una posible violencia por parte de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado, que no se engañen. La violencia, aunque sea presuntamente defensiva, no tiene lugar ni cabida. Tengámoslo todos claro. Este proyecto republicano ha de defenderse a cara vista, con las manos en alto y denunciando públicamente y ante las autoridades a cualquier persona violenta. Sea quien sea. 

No caigamos en provocaciones. No caigamos en la trampa. La República es pacífica y los republicanos, también. Y así lo ha pedido expresamente el propio Puigdemont en las últimas horas.