La misma semana en que el Partido Republicano escogió como presidenciable de los Estados Unidos a Donald Trump -como es sabido, no muy amigo de la inmigración-, Los Angeles Times publicó el reportaje de un joven de 18 años, proveniente de Guatemala, que ahora intenta subsistir como puede en California.

La vida de Gaspar Marcos -así se llama el joven-, lejos de ser como querría cualquier chico de su edad, es un sacrificio constante. Gaspar va a escuela, después tiene que trabajar ocho horas lavando platos, y al final de la jornada, ahora sí, intenta dormir al menos tres horas. Con todo, tiene que pagar 600 dólares (unos 406 euros) para el alquiler de una habitación.

Aunque muchos no se querrían ver en la piel de Gaspar, seguramente él prefiere la vida que lleva ahora a la anterior. Con 5 años perdió a sus padres, y con 13 tuvo que mudarse solo a los Estados Unidos. Un largo sacrificio para poder "vencer" -tal como él afirma- a la vida que le ha tocado.

Como él, al menos otros 100.000 jóvenes -y niños- han dejado América Central en los últimos cinco para trasladarse a los EEUU. En el caso de Guatemala, por motivo de una guerra relacionada con las drogas, que tiene a la policía y al cártel constantemente enfrentados. ¿Puede este reportaje haber abierto los ojos de personas que no eran conscientes de situaciones como ésta? Todo indica que sí, ya que aunque las visitas en Youtube sean por ahora discretas, el vídeo ya supera en Facebook los 10 millones de visualizaciones.