El Toyota Yaris Cross puede presumir de haber sido una de las mejores decisiones que ha tomado la marca japonesa en los últimos tiempos. Por mucho que el fabricante ya tuviera un B-SUV muy exitoso en España y en Europa, el C-HR, lanzar un modelo un poco más modesto y, sobre todo, con un diseño mucho más neutro y menos agresivo a convertido a este Yaris Cross en una de las opciones no tan sólo más vendidas de Toyota en España, sino en uno de los modelos más exitosos en general en nuestro mercado.

Y es que uno de los grandes argumentos de ventas de este Yaris Cross es que cuenta con un motor híbrido auto recargable, una mecánica perfecta para este tipo de modelos pensados para moverse de forma habitual por entornos urbanos e interurbanos logrando consumos muy bajos pero que, a su vez, le permite afrontar viajes en autopista y autovía a altas velocidades sin problema aunque no sean su mejor terreno de juego.

 

El hecho de que este tipo de motor le permite tener un consumo mucho más bajo que el de sus rivales de combustión, que llegue además asociado a una transmisión automática y que cuenta de serie con la etiqueta ECO de la DGT son tres de sus mejores argumentos.

El fallo que Toyota no ha solucionado con el nuevo Yaris Cross

Eso sí, en Toyota han decidido escuchar a algunos de sus clientes que reclamaban una versión más potente de este modelo y han optado por ampliar su gama mecánica, de tal manera que este modelo cuenta ahora con el motor de 116 caballos de potencia, el más sencillo, y con uno más potente, de 130 caballos de potencia.

Esta nueva versión está pensada para aquellos que, si bien no necesitan más potencia en ciudad, sí que quieren tener más respuesta a altas velocidades. El problema en este caso es que, como ocurre en tantos otros modelos de la marca japonesa, el motor sigue estand vinculado a un cambio automático tipo CVT, un cambio particular.

 

Y es que, como bien saben los que tienen un coche con este tipo de cambio, el problema en este caso es que el ruido que emite el motor cuando se acelera al máximo en situaciones como la de un adelantamiento o una incorporación a una vía de alta velocidad, es muy evidente y, sobre todo, no va acompañado de una aceleración acorde con el ruido que se escucha dentro del habitáculo.

Es cierto que son situaciones muy puntuales y que, a un ritmo normal, la insonorización de este Yaris Cross, como del resto de modelos de Toyota, es más que buena, pero este ‘pero’ con el cambio CVT es algo a tener en cuenta, sobre todo para aquellos que nunca lo han experimentado.