Fue hace ya muchos años cuando Toyota tomó la que seguramente pasa por ser la mejor decisión que ha tomado la marca japonesa en su larga historia en la industria del automóvil. Esa decisión no fue otra que la de empezar a apostar de forma clara y evidente por los motores híbridos auto recargables.
El primer modelo que logró unas cifras de ventas más que notables con este tipo de motor no fue otro que su famoso Toyota Prius, un modelo que provocaba risas entre los más puristas y que no recibió muy buenas críticas es lo que se refiere a prestaciones, pero que sentó la base para que muchos otros modelos de la marca japonesa se hayan convertido hoy en día en auténticas referencias en sus respectivos segmentos.
Y es que cabe tener en cuenta que cada vez son más los conductores que apuestan por este tipo de motores, entre otras cosas porque son motores que permiten poder tener consumos muy bajos y que por lo tanto se han convertido en los sustitutos de los diésel en este sentido, que llegan siempre asociados a transmisiones automáticas, un tipo de transmisión cada vez más popular en la industria, y que además permiten lucir la etiqueta ECO en España, un argumento muy a su favor en nuestro país.
A todo ello hay que sumar también el hecho de que, al ser motores más sencillos en muchos componentes, y teniendo en cuenta el rigor de los fabricantes japoneses a la hora de fabricar sus coches, acaban siendo motores extremadamente fiables, lo que provoca que Toyota siempre esté en las posiciones más altas en los ranking de fiabilidad.
Toyota se plantea eliminar sus opciones de combustión e ir con todo por los híbridos
Tal está siendo el éxito de este tipo de motores que la marca japonesa ya no esconden la posibilidad de, en uno de los mercados más importantes en el mundial como es el mercado de Estados Unidos en el que siguen teniendo muchos modelos que cuentan con motores de combustión tradicionales en sus gamas, ir poco a poco estudiando la posibilidad de eliminar estas opciones mecánicas y apostarlo todo por motores híbridos, ya sean auto recargables o enchufables, una idea que podría expandirse también al mercado europeo.
“En el futuro planeamos evaluar, modelo por modelo, si tiene sentido la transición a una propulsión exclusivamente híbrida”, y “los híbridos convencionales, y los enchufables, seguirán restando ventas a los coches eléctricos porque son alternativas más conocidas, más fáciles de usar y no hay que preocuparse por la autonomía”, han sido algunas de las declaraciones del jefe de ventas y marketing de Toyota en EE.UU, David Christ.
Así, la intención de la marca japonesa es la de convertirse en un fabricante que diga adiós a los motores de combustión tradicionales pero, eso sí, no lo ha puesto todo a los modelos 100 × 100 eléctricos, sino que siga jugando su mejor carta, la de los híbridos.