El éxito que está teniendo en los últimos años el Volkswagen T-Roc en nuestro país no hace otra cosa que evidenciar el cambio de tendencia que se ha producido tanto en nuestro mercado como en buena parte de los mercados en Europa respecto a las carrocerías de moda.

Y es que, si bien es cierto que hace algunos años los Volkswagen más vendidos en nuestro país eran el Polo, el Golf o el Passat, es decir, un utilitario, un compacto y una berlina, en los últimos años la entrada en juego de los SUV han puesto patas arriba todos los segmentos, entre otras cosas porque la inmensa mayoría de marcas han apostado de forma mucho más evidentes por este tipo de carrocería que por las clásicas.

 

Es más, cabe tener en cuenta que el SUV más vendido de Volkswagen, que a la vez es el modelo más vendido de la marca, el T-Roc, puede presumir de doblar actualmente sumando las cifras de ventas de los cuatro primeros meses de este año las matriculaciones que has logrado modelos como el Polo o el Golf.

La guerra fratricida en Volkswagen

Un Volkswagen T-Roc que acumula poco más de 5100 matriculaciones y que ocupa la 15ª posición en el ranking de los coches más vendidos en nuestro país. Es cierto que hay mercados en Europa donde este modelo tiene más éxito, y que ha habido años en los que este Volkswagen se ha ubicado en posiciones superiores, pero no es una posición precisamente dramática.

Lo que seguramente está empezando a preocupar a la marca alemana es que es precisamente un modelo también de Volkswagen es que le está robando mucha cuota de mercado a su modelo estrella. Con poco más de 4600 ventas, no es otro que el hermano de segmento del T-Roc, el T-Cross, el que ocupa la posición 21.

 

Evidentemente en la marca están más que satisfechos viendo como dos de sus modelos pueden presumir de ser de los más vendidos en nuestro país, entre otras cosas porque eso les ayuda a ser ni más ni menos que la tercera marca más matriculada en España, pero no son pocos los que empiezan apuntar que esta lucha fratricida en el fabricante de Alemania puede acabar teniendo consecuencias negativas, especialmente para el que es y va a seguir siendo seguramente su modelo estrella en Europa, el T-Roc.