El Seat Tarraco ha sido la última apuesta de la marca española en el segmento de los SUV. Una vez ya los Ateca y Arona estaban ya consolidados en nuestro mercado, la marca apostó por ir un paso más allá y entrar de lleno en el terreno de los SUV familiares.

No fue una apuesta precisamente arriesgada teniendo en cuenta que, como bien sabían en Seat, los monovolúmenes apenas tenían ya salida y muchas familias preferían optar por SUV de grandes dimensiones, con mucha habitabilidad, posibilidad de hasta siete plazas y mucho espacio interior.

 

Un Tarraco que, como no podía ser de otra forma siendo como es el SUV de mayores dimensiones de la marca, es también el que llega mejor dotado de la gama. Eso sí, es un modelo que, por mucho que las ventas de este segmento sean muy inferiores a las del segmento de los SUV compactos o los de tamaño medio, tiene unos cuantos rivales que le están poniendo las cosas muy difíciles. Uno de ellos, de hecho, es un modelo que comparte casi todo con él pero que, sin embargo, está teniendo mucho más éxito en nuestro país.

El Skoda Kodiaq es un SUV que, pese a ser casi idéntico que el Tarraco, tiene muchas más ventas en España que el Seat

No es otro que el Skoda Kodiaq, la apuesta de la firma checa en este segmento. No es que sea ningún secreto que tanto Skoda como Seat pertenecen al Grupo Volkswagen. De hecho, son las dos únicas marcas generalistas del Grupo, con Volkswagen como puente a las Audi, Porsche y Bentley.

 

Así, pese a que cada una de ellas tiene un lenguaje de diseño propio y una política de precio también propia, las comparten mucha tecnología. En este caso, tanto el Tarraco más básico de todos como el Kodiaq de acceso cuentan con el mismo motor: el 1.5 TSI de 150 caballos de potencia asociado a un cambio manual y a una tracción sencilla. Mecánica que, en los dos casos, pese a ser la más sencilla, es ya más que suficiente.

En cuanto al equipamiento, los dos llegan muy bien dotados. El Tarraco cuenta de serie con, ente otras cosas, control de crucero, sensores de parking, freno de mano eléctrico, cuatro elevalunas eléctricos, faros antiniebla, climatizador dual, llantas de aleación, sistema de sonido integrado y ordenador de viaje.

 

Por su parte, el Kodiaq llega con llantas de aleación de 17 pulgadas, asiento posterior partido por partes, retrovisores térmicos y cierre con mando, faros LED, instrumentación digital, aire acondicionado, sistema de sonido integrado, ordenador de viaje o cuatro elevalunas eléctricos.

En cuanto al precio, es el Kodiaq el que se lleva ahora el gato al agua. Como vemos en quecochemecompro.es, el precio del Skoda es de 27.500 euros, mientras que el del Tarraco es de 27.990 euros, en los dos casos con descuentos ya incluidos por financiación. Teniendo en cuenta que el modelo checo roza las 290 ventas ocupando la posición 79 del ranking y que el Seat no aparece ni entre los 100 primeros, es evidente que el checo es un modelo más exitoso.