Por mucho que Citroën no pueda presumir de ser una de las marcas más vendidas en España, sí que puede presumir la marca francesa de ser una de las que más arriesga en sus diseños, y eso es algo que en un mercado tan saturado como el actual siempre se agradece.

Los Citroën son modelos que siempre se han caracterizado por ser muy confortables y por tener ese punto de riesgo en sus diseños, algo que ha provocado que opciones tan interesantes y diferentes como el actual C4 se haya convertido en una referencia de la marca en nuestro país.

 

Precisamente viendo el éxito de este crossover (en teoría forma parte del segmento de los compactos), la marca optó por ampliar la gama de este modelo con una carrocería con un punto más familiar, el llamado C4 X. Una carrocería que, como bien podemos ver en las imágenes, hace de él un modelo peculiar y con muy pocos rivales directos, entre otras cosas porque se trata de un crossover con el tamaño de una berlina compacta y con ciertos aires de SUV.

El Citroën C4 X, un familiar diferente al resto

El principal punto a favor de esta carrocería respecto al C4 es que, evidentemente, cuenta con mucha más capacidad de carga. Mientras que la versión compacta cuenta con 380 litros de capacidad de carga, la versión X, la berlina, supera los 500 litros, convirtiéndose así en una opción más familiar y polivalente sin acabar teniendo unas medidas tan grandes que lo impidan ser un modelo útil también en el día a día.

 

Tal y como podemos ver en el configurador de la marca, la versión que llega con un motor de gasolina PureTech de 100 caballos de potencia asociado a una transmisión manual, una mecánica sencilla pero más que correcta, tiene un precio financiado de poco más de 26.000 euros. Una financiación con una cuota mensual (al margen de la entrada y la cuota final) de tan sólo 130 euros, una cantidad muy interesante.

Saben en la marca que va a ser difícil, sobre todo teniendo en cuenta el éxito del C4, que la versión X tenga también un buen resultado en cuanto a ventas, pero saben muy bien que este tipo de familiares distintos al resto son una opción arriesgada pero interesante en nuestro país.