No es que sea precisamente ningún secreto que la industria del automóvil está pasando por uno de los momentos más importantes de su historia. Y es que la entrada al juego de los motores 100 × 100 eléctricos está provocando que, teniendo en cuenta también las diferentes opciones mecánicas que podemos encontrar hoy en día en el mercado y que ya hace tiempo que dejaron de ser tan solo dos, la gasolina y el diésel, ha provocado que sean muchas las dudas que tengan muchos conductores a la hora de adquirir un nuevo coche.

En este sentido, lo más lógico es que, siguiendo el mismo patrón que seguimos a la hora de escoger qué tipo de carrocería necesitaremos, escojamos el tipo de mecánica que mejor se adapta a nuestras necesidades y a nuestro presupuesto.

 

En este sentido, si vamos a movernos de forma habitual por entornos urbanos o interurbanos, con pocos pasajeros y con poco equipaje, no tiene precisamente mucho sentido comprar un Show de grandes dimensiones con motor de gasolina, sino más bien seguramente un SUV urbano o un utilitario con motores HEV o EV en el caso de poder cargarlo en casa.

Si por el contrario vamos a necesitar un modelo con el que viajar muchos kilómetros en autovía y autopista intentar tener consumos bajos y una buena dinámica de conducción, las berlinas diésel o incluso los SUV diésel siguen siendo las mejores opciones.

Las marcas chinas cuentan con el ‘ok’ de los españoles

Por otro lado cabe destacar también que uno de los cambios más importantes en los últimos años ha sido la entrada en juego tanto en nuestro mercado como en el resto de mercados europeos de las marcas chinas, marcas de todo tipo que, eso sí, hace apenas unos años no vendían sus modelos en nuestro mercado.

En este sentido, llama especialmente la atención los resultados del Estudio Europa de Automoción 2024 del Observatorio Cetelem. Y es que una de las preguntas que se han realizado en este estudio pasa por saber hasta qué punto diferentes conductores de diferentes países estarían dispuestos a comprarse un coche chino, siendo el resultado en España el más alto de todos los países consultados, con un 42 % de los encuestados contestando a favor del coche chino.

 

Un resultado que se sitúa por encima de la media global, que es el 34 %, y que no hace otra cosa que evidenciar que, teniendo en cuenta que la inmensa mayoría de marcas chinas que llegan a España son marcas con modelos generalistas o de bajo coste, en nuestro país son modelos más que bienvenidos.