El MG HS híbrido enchufable se ha convertido en uno de los grandes disruptores del mercado español. Con una cuota de 199 euros al mes sin entrada, este SUV de mecánica electrificada no solo ofrece etiqueta CERO, sino también un nivel de potencia, confort y equipamiento que deja en evidencia a modelos de precio similar, especialmente a los de Dacia, centrados en propuestas más básicas y sin electrificación real.

No es casualidad que el MG HS PHEV esté captando tanto interés. Combina un motor de gasolina 1.5 turbo con uno eléctrico para entregar 258 CV, una cifra muy por encima de cualquier modelo de Dacia. Además, su batería de 16,6 kWh permite circular más de 50 km en modo eléctrico con homologación WLTP, y en entornos urbanos puede superar fácilmente los 60 km. Esto lo convierte en una alternativa clara a modelos térmicos convencionales que, aunque más asequibles en precio inicial, no pueden ofrecer los mismos beneficios fiscales ni las ventajas de uso en ciudad.

 

Teniendo en cuenta esta relación entre coste mensual, eficiencia y etiqueta medioambiental, el MG HS pone contra las cuerdas a marcas que hasta ahora dominaban el acceso al SUV familiar asequible. Frente a un Dacia Duster, por ejemplo, el HS enchufable ofrece más potencia, mejores acabados y tecnología muy superior, sin apenas diferencia en la cuota mensual si se compara con las versiones más equipadas del modelo rumano.

Mucho más que una oferta llamativa

Lo mejor es que el atractivo del MG HS PHEV no se queda en la cifra mensual. El habitáculo está bien insonorizado, los materiales transmiten solidez y la conducción es suave y cómoda. Dispone de climatizador automático, acceso sin llave, faros LED, instrumentación digital y una completa dotación de asistentes de seguridad desde el acabado básico.

 

Llama especialmente la atención cómo esta configuración permite a MG ofrecer una alternativa creíble, bien dotada y con etiqueta CERO por un precio que hasta ahora estaba reservado a modelos básicos sin electrificación ni ayudas a la conducción.

Por todo ello, no es exagerado afirmar que este híbrido enchufable se lo está poniendo muy difícil a Dacia. Aporta más por menos en un momento en el que el cliente medio busca eficiencia, tecnología y un coste asumible. Y ahí, la fórmula del MG HS está resultando difícil de batir.