Desde 2022 y bajo la obligación del Parlamento Europeo, todos los coches que salen de los concesionarios deben llevar el sistema llamado control de velocidad crucero. Un sistema que genera dudas en cuanto a si permite ahorrar o no combustible. A continuación te contamos la verdad sobre ello.

Este sistema permite establecer una velocidad fija durante el trayecto. Es ideal para rebajar el cansancio en los viajes largos y también para evitar exceder la velocidad. Y aunque al pisar el pedal del freno se desactiva automáticamente para primar la seguridad, no es recomendable usarlo en ciudades o carreteras con curvas. Las razones son obvias.

El sistema de control de velocidad crucero te ayudará a ahorrar combustible

Ahora bien, ¿este sistema permite rebajar el consumo? La respuesta es sí. Y a continuación te contamos por qué.

Cuando conducimos, es imposible mantener siempre la misma presión sobre el acelerador. Esto se traduce en aceleraciones y desaceleraciones realizadas de forma inconsciente. Aunque lo intentemos concienzudamente, siempre habrá variaciones en la velocidad si nosotros manejamos los pedales.

Interior Renault Clio
Interior Renault Clio

Activando este sistema, en cambio, la velocidad es siempre constante. Es el coche quien se encarga de mantener esa velocidad, ya sea en llano o en cuestas, con lo que evitaremos esas pequeñas variaciones en el trabajo del motor. Y ello se traduce en un importante ahorro de combustible.

Ahorrarás entre medio litro y un litro cada 100 km

Concretamente, podemos ahorrar entre medio litro y un litro cada 100 km. Puede parecer poco, pero si, por ejemplo, realizamos un viaje de 500 km, estaremos ahorrando entre 2,5 y 5 litros, lo que se traduce en un ahorro de entre 4 y 8 euros, teniendo en cuenta un precio de 1,6 euros por litro de combustible. 

Con todo, la recomendación es usar esa palanca que activa el sistema de control de velocidad crucero siempre que podamos y mantenerlo activado el mayor tiempo posible. El ahorro puede venir por dos frentes: el combustible y una posible multa por  pasarnos de la velocidad establecida.