Fiat sabe muy bien que, por mucho que como marca no pueda presumir de ser precisamente una de las punteras en Europa en materia de cuota de mercado, tiene en su catálogo uno de los modelos más vendidos y también más alabados de las carreteras europeas: el 500.

Fue hace ya unos años cuando el fabricante italiano decidió recuperar este icónico modelo que había triunfado décadas atrás y reformularlo para que encajara con las necesidades del mercado. Un Fiat 500 que se convirtió en pocos años en la referencia entre los urbanos por su diseño, su tamaño y, sobre todo, su excelente relación calidad precio.

 

Evidentemente, como bien saben los que tiene uno, no estamos ante un modelo con prestaciones top ni mucho menos, ni con el coche con mayor habitabilidad ni capacidad de carga del mercado. Pero es que tampoco es su propósito, que pasa por el de convertirse en un coche perfecto para moverse por entornos urbanos e interurbanos con bajo consumo y unas dimensiones perfectas para sortear el tráfico y aparcar donde muchos otros no pueden.

La oferta de renting del Fiat 500e

Precisamente viendo el éxito de este modelo, en Fiat optaron también por ampliar su gama mecánica con una opción cien por cien eléctrica, una opción que encaja más que bien con su concepto de coche pequeño y urbano. Y es que los eléctricos, al menos los de precio razonable, están más centrados en ser modelos de cortos recorridos que de largos viajes.

 

Ahora, tal y como podemos ver en el configurador de la marca, Fiat propone un renting de este 500 en su versión eléctrica, que tiene una autonomía que ronda los 200 kilómetros aunque pueden ser más en conducción exclusivamente urbana, por tan sólo 119 euros al mes. Para poder tener esta cuota tan baja es necesario, eso sí, aportar una entrada de casi 4.500 euros y firmar el contrato de 3 años, es decir, 36 meses. Además, desde el fabricante apuntan que, como regalo, con esta oferta viene también incluido un cargador Wallbox.

No sería de extrañar entonces que muchos vieran en él una opción interesante y poco arriesgada en cuanto a precio para dar el salto a la movilidad eléctrica, especialmente aquellos que necesitan un coche pequeño y con el que beneficiarse de las ventajas de un eléctrico, que con la etiqueta CERO de la DGT y con un coste por kilómetro mucho menor que un modelo de gasolina o diésel no es que sean pocas.