El presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, se compromete a defender Bakhmut, a pesar de los rumores de retirada. Desde hace días, se ha instalado una incertidumbre en torno a la ciudad ucraniana sobre los posibles rumores que, finalmente, las tropas del país, acaben abandonando, después de nueve meses de asalto continuado por parte de las tropas rusas.

Durante el discurso de este lunes por la noche, sin embargo, Zelenski ha querido desvanecer dudas. Zelenski ha dicho que había reunido a generales de alto rango y los había instado a continuar con la defensa de la ciudad, "le he dicho al jefe del estado mayor que encontrara las fuerzas apropiadas para ayudar al ejército en Bakhmut. No hay ninguna parte de Ucrania que se pueda abandonar".

En este sentido, después de unas reuniones con Zelenski, Valerii Zaluzhnii, comandante en jefe de las fuerzas armadas, y Oleksandr Sirskii, comandante de las fuerzas terrestres de Ucrania, "se pronunciaron a favor de continuar con la operación defensiva y fortalecer todavía más las posiciones ucranianas en Bakhmut", ha dicho la oficina de Zelenski.

Bakhmut, epicentro de grandes combates

La defensa de Bakhmut por parte de Ucrania está provocando grandes pérdidas a las fuerzas rusas, preparando el escenario para una futura contraofensiva ucraniana, según la última actualización del Instituto para el Estudio de la Guerra. El desgaste que han experimentado las tropas rusas y el estancamiento de las ofensivas en otros lugares podría significar que "el ejército ruso probablemente tendrá dificultades para mantener cualquier operación ofensiva posterior durante algunos meses", según constata el mismo grupo de expertos.

El ISW dice que "las cantidades significativas" de personal movilizado cerca de Vuhledar y en otras operaciones sugieren "que las fuerzas rusas seguramente no tienen capacidad para reforzar todavía más el área de Bakhmut significativamente sin retirar las fuerzas de un área más próxima al frente a causa de las reservas sin explotar".

Incluso si el ejército ruso consigue capturar Bakhmut, el Instituto expone que probablemente no podría capitalizar esta victoria y, combinado con la "ofensiva rusa estancada" en Lugansk, las circunstancias "probablemente establecerán condiciones sólidas para una futura contraofensiva ucraniana".

Una ciudad destrozada

Bakhmut, actual epicentro de duros combates entre el ejército ucraniano y el ruso, se encuentra solo a dos horas y media en coche, concretamente a 124 kilómetros de distancia de la ciudad fantasma de Márinka. Las imágenes que llegan de la ciudad, también muestran edificios destruidos y una ciudad destrozada. Después de más de 7 meses de intensos combates en la ciudad, podría disputarse una batalla final por una ciudad que un día fue epicentro industrial y hoy son edificios castigados por bombas y misiles. Las tropas ucranianas están invitando a las pocas familias que se resisten a marcharse a abandonar la ciudad.

La violencia incesante que ha sufrido Bakhmut las últimas semanas, después de meses de esfuerzos rusos por capturar la ciudad, solo se ha intensificado los últimos días cuando las tropas rusas y también el grupo de mercenarios Wagner ha intentado por todos los medios posibles rodear la ciudad.

 

Imagen principal: el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, en una rueda de prensa desde Lviv / Efe