Graves incidentes se han producido en París y Londres en una manifestación contra el racismo en la capital francesa, y otra de contrarios al movimiento Black Lives Matter en la capital británica.

Efectivos policiales han lanzado gases lacrimógenos para dispersar una multitudinaria protesta en la plaza de la República de París, que no había sido autorizada por la sospecha de que podrían atacar los comercios, según informa la BBC. Algunos manifestantes han lanzado piedras contra los agentes.

La manifestación de París, que ha congregado a unas 20.000 personas según los organizadores, había sido convocada por Assa Traore, hermano de Adama, un joven de raza negra que murió bajo custodia policial en el 2016 en norte de la capital. "Hoy nos reunimos para denunciar la violencia policial. Nos reunimos para denunciar la violencia social. Nos reunimos para denunciar la violencia racial", ha asegurado Traore ante la multitud.

Mientras tanto, unos contramanifestantes de extrema derecha han desplegado una enorme pancarta denunciando un supuesto "racismo anti-blanco" desde una azotea, que ha sido hecha añicos por los vecinos de un balcón de los pisos inferiores. Los enfrentamientos han pasado después a la calle, con escenas de tensión, que la policía ha intentado cortar también con severidad.

También se han producido incidentes en la manifestación contra el movimiento Black Lives Matter en Londres, donde algunos manifestantes han golpeado y han lanzado objetos a la policía, y ésta ha respondido con gases lacrimógenos y cargas a caballo. La marcha tenía el objetivo declarado de "proteger" las estatuas levantadas en torno a Parlamento británico, como la del primer ministro Winston Churchill, protegida con unos paneles para evitar ataques como los sufridos por otros monumentos durante las protestas antirracistas.