El presidente saliente de los Estados Unidos, Donald Trump, sigue sin reconocer la derrota después de las elecciones presidenciales del 3 de noviembre, pero ha dejado entrever que habrá un nuevo gobierno en los Estados Unidos. En su primera comparecencia en ocho días, Trump se ha dedicado exclusivamente a alabar la gestión de la pandemia de la Covid-19 y a aplaudir los avances en la vacuna.

Cuando le han preguntado por si habría algún nuevo confinamiento en el país, el presidente saliente ha dicho: "Esta administración no irá a un confinamiento, pero la próxima quién sabe qué hará", ha apuntado Trump. De hecho, el resultado final de las elecciones ya se ha dado a conocer con victoria de Biden con 306 votos electorales por los 232 de Trump. El 8 de diciembre serán oficiales.

"Mi Administración no impondrá un confinamiento. Con suerte, pase lo que pase en el futuro..., ¿quién sabe qué Administración será? Supongo que el tiempo lo dirá, pero puedo asegurar que esta Administración no impondrá un confinamiento bajo ninguna circunstancia", ha reflexionado en voz alta el presidente saliente de los EE.UU. utilizando unas palabras que son las que más se han acercado a reconocer la derrota electoral.

Aparte de eso, la comparecencia de Trump desde el Jardín de las Rosas de la Casa Blanca se ha centrado en hablar del coronavirus. "Los líderes de otros países me han llamado para felicitarnos por lo que hemos sido capaces de hacer, y hemos ayudado a muchos países con los respiradores, y con todos los problemas que están teniendo", ha afirmado el presidente republicano.

"Mi Administración ha iniciado la mayor movilización en la historia de los Estados Unidos en el desarrollo y la fabricación de terapias y vacunas en un tiempo récord", ha insistido Trump, que ha calificado la operación Warp Speed "de inigualable en ningún sitio más del mundo".

Finalmente, a pesar de reconocer la buena noticia que la vacuna de Pfizer es efectiva en más del 90% de los casos, el presidente saliente de los EE.UU. no se ha ahorrado las críticas a la farmacéutica norteamericana por negar haber formado parte de esta operación Warp Speed. "Se trata de una tergiversación desafortunada. Por eso les dimos 1.950 millones de dólares", ha lanzado Trump en una rueda de prensa que tampoco ha admitido las preguntas de los periodistas.