El Tribunal Supremo de los EE.UU., liderado por una mayoría conservadora, ha puesto punto final este jueves a décadas de discriminación positiva en las universidades. El tribunal ha dictaminado en contra de discriminación positiva, al establecer que Harvard y la Universidad de Carolina del Norte violaron la Constitución para utilizar la raza como un factor en el proceso de admisiones. La opinión del tribunal la ha escrito su el presidente, el juez John Roberts, y ha recibido el apoyo de los cinco magistrados conservadores.

"Muchas universidades han (...) concluido, de forma errónea, que la piedra angular de la identidad de un individuo no son los desafíos superados, las habilidades construidas o las lecciones aprendidas, sino el color de su piel. Nuestra historia constitucional no tolera esta decisión", figura en la sentencia.

Joe Biden, en contra de la decisión

Esta decisión del tribunal ya ha generado la reacción del presidente del país, Joe Biden, que ha pedido a las universidades que sigan garantizando la diversidad racial al considerar que el tribunal "ha entendido mal la discriminación positiva". Los jueces creen que el proceso de admisiones de Harvard y la Universidad de Carolina del Norte, dos de las instituciones más antiguas del país, violan la decimocuarta enmienda de la Constitución, que garantiza la igualdad ante la ley.

Con respecto a Carolina del Norte, la acusación argumentaba que la política de admisiones era discriminatoria contra los candidatos blancos y asiáticos ante los afroamericanos, hispanos y nativos americanos, mientras que en la de Harvard, un grupo de estudiantes asiáticos denunciaron el uso de criterios subjetivos por limitar el número de candidatos aceptados.

La oposición de la jueza progresista

La jueza progresista Sonia Sotomayor, que tradicionalmente ha defendido la capacidad de las universidades para considerar a la raza en el proceso de admisiones, escribió en su opinión de desacuerdo que la decisión de los magistrados conservadores "revierte décadas de precedentes y de progreso importante".

La discriminación positiva tomó relevo a los EE.UU. durante el movimiento de defensa de los derechos civiles de los afroamericanos y el final de la segregación racial en las escuelas a la década de 1950. La decisión ahora obligará a las universidades a renovar sus políticas y buscar nuevas formas para garantizar la diversidad de sus estudiantes. El objetivo de estas políticas es aumentar la diversidad de los estudiantes con el fin de mejorar su educación y experiencia. Las escuelas también utilizan programas y oportunidades de becas destinadas a impulsar diversidad.

El Supremo había protegido desde 1978 el derecho de las universidades a considerar a la raza como un factor en el proceso de admisión, aunque de forma limitada. El presidente Joe Biden ha dicho que está totalmente en desacuerdo con la decisión del Supremo y ha recordado que durante décadas las universidades han utilizado a la raza como uno de los factores a tener en cuenta a la hora de admitir a los estudiantes.