La tensión entre España y Rusia aumenta. La Armada rusa ha empezado hoy a seguir los movimientos de la fragata española Cristóbal Colón, al adentrarse en aguas del mar Negro, según ha informado el Centro de Control de Defensa Nacional.

El Cristóbal Colón ha entrado en este mar a las 15:00 hora local (12.00 GMT), según precisa la nota castrense recogida por la agencia Interfax.

Es más, según informó la Flota rusa el pasado 25 de febrero, sus barcos también siguen el cazaminas de la Armada española Tajo.

Tensión con la OTAN

La flota rusa acostumbra a escoltar a cierta distancia en los barcos de la OTAN que penetran en el mar Negre, especialmente desde la anexión por Moscú de la península ucraniana de Crimea en el 2014.

De hecho, Moscú ha acusado la Alianza Atlántica de haber incrementado su presencia en la zona desde un incidente en 2018 entre las armadas rusa y ucraniana en el mar de Azov. Se trata de un conflicto que también se ha acentuado por la creciente presencia en los últimos años de barcos norteamericanos, como el destructor Donald Cook, que han atracado en puertos ucranianos, como el de Odesa.

Rusia justifica sus reclamaciones asegurando que aquellos barcos militares que no pertenezcan a países bañados por el mar Negro no pueden alargar su estancia en estas aguas más de 21 días. Se acogen a la Convención de Montreux de 1936, la cual regula el paso por los estrechos de Bósforo y Dardanels.

Tropezada con cazas militares

Este nuevo encontronazo entre los dos países se ha producido después de que el pasado 4 de marzo, cazas de los militares españoles interceptaran dos aeronaves rusas cerca del territorio controlado por la OTAN, en el marco de la operación de patrullaje de la Alianza Atlántica en el mar Negro.

Este incidente fue el primero que obligó a intervenir a las fuerzas españolas, según informó la OTAN en un comunicado.

Los Eurofighters realizaron un despegue de emergencia desde la base rumana Milail Koglaniceanu para interceptar en las aeronaves rusas, después de un aviso de los radares de la OTAN de unos aviones no identificados en el sur del mar Negro.

Según indicó el comandante del destacamento español en Rumania, el coronel Jose Enrique Hernández, "durante la misión de alerta nuestros Eurofighters identificaron dos cazas rusos Su-30 que volaban sin señal de microchip, ni plan de vuelo, ni estaban en contacto con el control de tráfico aéreo civil". Los aviones de la OTAN siguieron los cazas rusos y "demostraron la capacidad de la Alianza para responder rápidamente a situaciones que surgen cerca del espacio aéreo" de la organización militar.

Las aeronaves españolas escoltaron a las rusas, las cuales no dejaron de operar en espacio aéreo internacional. Una vez los Su-30 volvieron a poner rumbo a nordeste del mar Negro, los Eurofighters españoles volvieron a la base rumana, señaló la OTAN.

 

Imagen principal, barco de la flota rusa en el mar Negre / Pixabay DimitroSevastopol