Un coche se ha estampado este miércoles por la mañana contra las oficinas de la canciller alemana, Angela Merkel, en Berlín. Según ha informado la agencia Reuters, el vehículo tenía un mensaje contra "las políticas de globalización" del ejecutivo. Además, también habría otro mensaje que acusa al gobierno de Merkel "de asesinos de niños y abuelos".
Ahora, los cuerpos de seguridad alemanes están inspeccionando la zona y el conductor, un hombre joven, ya ha sido detenido. "Estamos investigando si el conductor chocó deliberadamente contra la puerta. Está detenido", ha asegurado la policía de Berlín en un tuit.
El incidente coincide con una reunión programada de la canciller para debatir sobre la aplicación de nuevas restricciones contra el coronavirus en el país.
Car seen crashing into gate of Merkel's office in Berlin pic.twitter.com/yCmjsncVFV
— Reuters (@Reuters) November 25, 2020
De momento, la policía no ha informado si hay víctimas, pero tanto el coche como la valla están aparentemente en buen estado. Además, tampoco está claro si Merkel estaba en aquel edificio. Se trata de la oficina de la cancillería, una estructura posmodernista blanca situada en una plaza del edificio del Reichstag que acoge el Parlamento alemán.
Un país muy castigado por la Covid
Alemania dedicó muchos recursos durante la primera oleada de la pandemia de la Covid, pero es ahora cuando se está encontrando con los problemas más importantes. El viernes pasado registró casi 24.000 nuevos casos, una cifra récord. Igual que la cantidad de pacientes ingresados en la UCI.
Los datos oficiales de la Asociación Interdisciplinaria Alemana de Medicina Intensiva y de Emergencia (DIVI) demuestran que el número de pacientes con coronavirus en la UCI ha aumentado de 267 el 21 de septiembre a 3.625 el 20 de noviembre, un aumento de más de 13 veces en sólo dos meses.
Alemania tiene una alta capacidad de camas de cuidados intensivos, con 33,9 camas por cada 100.000 habitantes, según recoge un artículo de la CNN Español. Si lo comparamos con otros países, como por ejemplo, Italia, se puede ver la diferencia, con 8,6 por 100.000 habitantes. España estaría un poco por encima, con 9,7 por cada 100.000 habitantes.