El Gobierno ruso ha vaticinado este lunes que el mundo será "más peligroso" si los EE.UU. abandonan el Tratado sobre Misiles de Medio y Corto (INF, por sus siglas en inglés). "La intención de abandonar este documento causa preocupación, ya que esta medida, una vez puesta en práctica, hará que el mundo sea más peligroso", ha concretado el portavoz presidencial Dmitri Peskov.

Esta es la reacción del Kremlin sl anuncio que hizo el sábado pasado el presidente de los EE.UU., Donald Trump, quien avanzó en un acto en Nevada que "daremos por acabado el acuerdo y después desarrollaremos las armas". La disputa entre las dos potencias por este tema llega después de una serie de acusaciones mutuas en que cada país afirma que es el otro quien incumple el Tratado. La OTAN ha avalado las acusaciones de Trump este mismo lunes. El presidente norteamericano añadió que sólo retrocederá si tanto Rusia como China firman un nuevo acuerdo. Será el mismo asesor de seguridad nacional de la Casa Blanca, John Bolton, quien detalle al presidente ruso los futuros movimientos del ejecutivo norteamericano en una reunión en el Kremlin este martes.

Aunque el secretario del Consejo de Seguridad de Rusia, Nikolái Pátrushev, ha hecho un llamamiento a "disipar" estos reproches entre ambos países, fuentes del Kremlin han recordado que Vladimir Putin ha dicho en "muchas ocasiones" que el abandono de EE.UU. del tratado "obligará a Rusia a tomar medidas para garantizar su propia seguridad". "Otros países, incluida Rusia, harán las acciones necesarias para reestablecer el equilibrio de fuerzas en este terreno", han añadido.

Rusia teme que la ruptura del consenso sobre los misiles de corto y medio alcance suponga vía libre a EE.UU. para desplegar este tipo de armamento cerca de las fronteras rusas, en países como los bálticos o Ucrania. Este tratado -acordado por los presidente norteamericano Ronald Reagan y su homólogo soviético Mijaíl Gorbachov el año 1987- fue el primero que se firmó durante la Guerra Fría y consistía en que las dos superpotencias nucleares eliminaran los misiles balísticos y de crucero que estuvieran a una distancia de entre 500 y 5.500 kilómetros.

Europa y China, incómodas, con la posición de Trump

Tanto la Unión Europea como China se encuentran en una posición incómoda con la escalada de tensión entre EE.UU. y Rusia en materia nuclear. Los motivos, no obstante, son diferentes. Por una parte, los países europeos creen que el Tratado se tiene que mantener a toda costa, ya que es clave para "la estabilidad estratégica". Así se lo ha hecho saber el presidente de Francia, Emmanuel Macron, a Donald Trump después de hablar con él por teléfono. En esta misma línea, la Comisión Europa (CE) ha pedido a las dos potencias nucleares que mantengan un "diálogo constructivo para preservar el acuerdo".

Por su parte, China ha considerado un error la posible retirada de los EE.UU. del INF y también el hecho de que Trump considerara la situación del gigante asiático como una de las principales razones para hacerlo. Eso se debe a las sospechas que el objetivo que persigue realmente Trump es el de sumar China al acuerdo con el fin de limitar el aumento de su arsenal nuclear.