Fin del misterio. El objeto esférico de metal que apareció la semana pasada cerca de la playa de Enshu, en Japón, no era más que una boya. Ni explosivos, ni espionaje extranjero. Todas las hipótesis sobre el hallazgo en la ciudad de Hamamatsu han quedado sin efecto en el momento en que las autoridades japonesas han confirmado de qué se trataba realmente: una inofensiva bola flotante de metro y medio de diámetro. Afortunadamente, y después de haber movilizado equipos de desactivación de explosivos, la preocupación ha quedado en un susto, y la alarma generada por la misteriosa bola es un signo más de los tiempos que corren: histeria generalizada en las redes sociales y la aparición de objetos no identificados que han resultado ser medios para el espionaje, como el caso de los globos aerostáticos espía chinos.

La misteriosa boya japonesa

Así, según las autoridades japonesas, la misteriosa bola era una boya arrastrada hasta la costa por el oleaje. Algunos usuarios de redes sociales han matizado que se trataría de una boya diseñada para atracar embarcaciones. Una pareja que caminaba por la playa la semana pasada vio el objeto, y las autoridades permanecieron relativamente preocupadas hasta que pudieron comprobar, gracias a un escáner, que estaba completamente vacía. La zona también se acordonó a la espera de una explicación, y las redes se llenaron de especulaciones, chistes y memes sobre lo que podría ser. Algunos usuarios incluso sugirieron que se trataba de una antigua mina subacuática, aunque desde un principio la hipótesis más compartida era que solo era una boya, teoría que se ha acabado confirmando.

Preocupación por los globos espía chinos

Quizás la razón por la cual las autoridades japonesas se alarmaron ante la aparición de la misteriosa bola es el reciente descubrimiento de globos aerostáticos espías chinos en los Estados Unidos. Los EE. UU. acusan a China de haber estado trabajando desde hacía tiempo en un "programa" de globos espía. Eso es lo que ha revelado el portavoz de Seguridad Nacional norteamericano, John Kirby, que ha asegurado que se trata "de un programa en el que los chinos han estado trabajando durante varios años. Han intentado mejorarlo, lo han hecho crecer y lo han incrementado, todo con el objetivo de obtener información de inteligencia," ha afirmado el portavoz. Más concretamente, la nave se habría detectado sobre Costa Rica, Colombia y Venezuela, afirman varias fuentes. El secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, también ha alertado de un "incremento de las actividades de inteligencia de China en Europa".