El bloqueo de la frontera de Macedonia a los refugiados ha vuelto a provocar imágenes dramáticas y de auténtica desesperación. En la ciudad fronteriza de Idomeni se volvieron a utilizar ayer gases lacrimógenos contra los que esperaban impacientes delante de la alambrada. Pero no todos pueden pasar. La semana pasada, el gobierno del país decidió endurecer las leyes fronterizas y a estas alturas sólo dejan pasar a los sirios o iraquíes.
El lunes por la noche, después de dejar pasar a unos 300 refugiados provenientes de Irak y Siria, otros refugiados intentaron pasar la valla para seguir su camino hacia el norte de Europa. La policía de Macedonia allí presente no lo permitió, y empezó a utilizar esta herramienta de dispersión ante los refugiados.
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Momentos de tensión delante de la frontera en Idomeni / Atlas
30.000 refugiados en la alambrada
Se calcula que actualmente más de 30.000 refugiados están atrapados en Grecia, ante el cierre de las fronteras por parte del gobierno de Skopje. Estos datos ponen de manifiesto lo que hoy ha señalado la ONU, y es que ven “inminente” una crisis humanitaria en Grecia. Sólo durante los dos primeros meses de este año, unos 122.000 refugiados y emigrantes han entrado en el país heleno. Unos datos que contrastan con los 129.000 refugiados que llegaron los seis primeros meses de 2015, según explica Vicent Cochatel, coordinador para la crisis de los refugiados de la Agencia de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR).
Las cifras de refugiados atrapados en el país heleno son muy altas, y Atenas se ve superada por la situación. La ONU calcula que ayer la cifra de personas que necesitaban un lugar para poder dormir se situó en 24.000 personas, 8.500 de las cuales se encontraban en Idomeni. Frente a estas circunstancias, la organización explica que ayer no todos habrían podido ser atendidos y que, como mínimo, unas 1.500 personas habrían dormido en la intemperie, en un momento en que Europa se encuentra todavía dentro de la época invernal. Las mínimas en Idomeni durante la noche llegaron ayer a cerca de los 6 grados.
Según ACNUR, Grecia necesita un mejor plan de contingencias y “urgen más recursos y coordinación para revertir el caos y el sufrimiento de los refugiados”. El coordinador de esta crisis reclama más ayuda internacional y asegura que “Grecia no puede manejar la situación sola”.
A pesar de las promesas de otros países de recibir 66.400 de los refugiados llegados a Grecia, a estas alturas sólo se han otorgado 1.593 plazas y apenas han tenido lugar 325 reubicaciones.
Foto portada: EFE