La Unión Europea está intentando imponer un precio máximo al gas ruso, pero continúa adelante con los impuestos extraordinarios sobre las ganancias "excedentes" de las compañías energéticas, según un documento filtrado del que se hace eco el diario británico The Guardian. El proyecto de reglamento sobre "la herramienta de emergencia eléctrica" no contiene un límite de precio para el gas ruso ni para el gas importado, después de que los estados miembros no pudieran ponerse de acuerdo sobre las restricciones la semana pasada. Se espera que la UE imponga impuestos extraordinarios sobre las altas ganancias de las empresas de combustibles fósiles, con un tope separado sobre los ingresos de los productores de la electricidad con bajas emisiones de carbono.

Se espera que la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, publique en plan de Europa para hacer frente al aumento de los precios de la electricidad cuando pronuncie su discurso anual sobre el estado de la unión este miércoles. El texto final que destaca el diario británico todavía podría cambiar, pero lo que ha visto la luz hasta ahora, deja entrever dudas sobre el apoyo de los Estados miembros de la UE para la opción de poner límite en el gas ruso, como respuesta.

Países que están en contra de limitar los precios del gas

Los Estados miembros de la UE que importan grandes cantidades de gas de Rusia, incluidas Hungría, Eslovaquia y Austria, se han pronunciado en contra de un límite en el gas ruso porque temen que el Kremlin pare todos los flujos de gas, hundiendo sus países a una recesión. El presidente ruso, Vladímir Putin, ya ha amenazado con detener las exportaciones de energía en Europa si se acuerda este plan.

Cerca de una docena de países, incluidos Francia y Polonia, querrían imponer un límite de precio en todo el gas importado, cosa que ven como una manera mejor de frenar el aumento de los precios. La Comisión no está entusiasmada con esta idea, porque teme que la UE pierda delante países dispuestos a pagar más en el mercado altamente competitivo del gas natural licuado.

Los Países Bajos y Dinamarca desconfían de cualquier límite de precios, mientras que Alemania teme que un límite de precios en el gas ruso genere divisiones.

¿Qué pasa si los Estados miembros no se ponen de acuerdo?

Con los estados miembros divididos, la Comisión, que es responsable de redactar las propuestas legales de la UE, búsqueda medidas que unan los 27 miembros. Los gobiernos de la UE, mayoritariamente, dan apoyo a limitar el precio de la electricidad de fuentes bajas en carbono, como las energías renovables o la energía nuclear, y reciclar estos fondos para hogares y empresas vulnerables.

Las compañías de petróleo y gas se enfrentarán a un impuesto sobre las ganancias inesperadas por separado, descrito como una "contribución solidaria". En el documento filtrado, la comisión estima que habrá un aumento de cinco veces en las ganancias de las compañías de petróleo, gas y carbón en el 2022. Estas ganancias "excedentes" e "inesperadas" no resultan de ninguna elección económica o de inversión, afirma la comisión, sino "desarrollos impredecibles en los mercados energéticos después de la guerra ilegal en curso en Ucrania". Al texto, resalta el diario, no se propone ninguna tasa para el impuesto sobre las ganancias extraordinarias.

 

Imagen principal: presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen / Efe