Hace más de un año y medio que el mundo veía como miles de seguidores de Donald Trump, siguiendo los pasos de su líder, se negaban a aceptar los resultados de las elecciones que dieron la victoria a Joe Biden. Todo acabó en proclamas encendidas de Trump y una masa de sus seguidores asaltando el Capitolio el 6 de enero de 2021. Armados y muchos de ellos miembros de grupos de extrema derecha y abiertamente fascistas, se adentraron en uno de los edificios más importando de la democracia americana con aparente impunidad. Sin embargo, estos hechos no quedan al margen de los tribunales. Mientras Trump es investigado por la comisión del Congreso, uno de sus seguidores acaba de ser sentenciado a siete años de prisión.

Se trata de un miembro de un grupo paramilitar de extrema derecha llamando a Three Percenters. Guy Reffitt, ha sido condenado para su participación en el asalto al Capitolio, donde llevó su arma de horca. La sentencia es de un total de siete años y tres meses. Reffitt se trata del primer acusado por el asalto al Capitolio al recibir una sentencia por sus actos, según informa el The New York Times.

Reffitt fue condenado por obstruir los procedimientos en el Congreso, allanar el Capitolio llevando un arma, enfrentarse a los policías, transportar armamento de manera ilegal y amenazar a sus tres hijos adolescentes si lo denunciaban; delitos de los cuales se había declarado inocente. Sin embargo, la jueza del caso ha decidido no condenarlo por "terrorismo doméstico", como pedía la Fiscalía y por lo que habría podido pasar 15 años en la prisión.

La investigación en Trump

Mientras sus seguidores se preparan para pasar ante los tribunales por los hechos del asalto al Capitolio de 2021, el comité legislativo que investiga los hechos no deja de sacar a la luz los trapos más sucios del exmandatario. Uno de los últimos detalles del día del asalto que han indignado a la opinión pública estadounidense ha sido la constatación que Trump, decidió no frenar el asalto porque le convenía, y además, pasó la tarde siguiéndolo a través de la cadena conservadora Fox News.

El comité y parte de la sociedad de los Estados Unidos le han reprochado su pasividad. Concretamente, el presidente de esta comisión, el demócrata Bennie Thompson, ha indicado que "era la única persona en el mundo capaz de parar la multitud. No pudo ser movilizado ni por sus asistentes ni por sus aliados. Ignoró las peticiones desesperadas de su propia familia, incluidos sus hijos, Ivanka y Donald Jr.".

Tono y eso, sesiones anteriores de este comité han mostrado como Trump, al no verse como objetivo de los asaltantes, no solo los animó sin pensar en las consecuencias, sino que se quería unir. "Soy el maldito presidente, llévame al Capitolio", lanzó Trump a su jefe de seguridad que se negaba a conducir la limusina presidencial hacia la masa de manifestantes que desfilaba hacia el Capitolio. Cuando sus peticiones fueron denegadas, el expresidente intentó coger el volante del vehículo y se puso violento con su propio servicio de seguridad.